La UD Almería y el Sevilla FC se enfrentarán en la tarde de este sábado en el primer partido del año 2025 para ambos conjuntos, un duelo de rivalidad andaluza correspondiente a la eliminatoria de dieciseisavos de final de la Copa del Rey que se disputará a partido único en el UDA Stadium. El choque tendrá tintes especiales para el canterano nervionense Alejandro Pozo, pero también para los tres ex del Real Betis que hay en la plantilla blanquirroja: el técnico, Rubi; Leo Baptistao y un Edgar González que ha reconocido que está recibiendo mensajes de amigos verdiblancos para 'meterle presión' con motivo del enfrentamiento ante el que hasta hace poco era su máximo rival.
"Jugadores del Betis no me han llamado, no; pero sí lo han hecho amigos que tengo allí, que me han dicho eso (que hay que eliminarles). Sobre todo me llamaron cuando salió el sorteo", ha explicado entre risas que remarcan el evidente tono de broma durante una entrevista concedida a Onda Cero Almería. Chanzas al margen, ha admitido que tanto él como el resto de la plantilla afrontan esta eliminatoria ante el Sevilla FC con mucha motivación. Tras acabar el año 2024 aupándose al liderato de LaLiga Hypermotion, quieren tomar un impulso anímico hacia el claro objetivo del ascenso eliminado al conjunto nervionense y metiéndose en los octavos de final de la Copa del Rey.
"La Copa es una ilusión para todos, para nosotros, para la afición, para el club y para el cuerpo técnico. No hemos tirado las rondas anteriores y hemos afrontado los partidos con mucha seriedad en campos que te pueden dar muchas complicaciones. En nuestro caso tenemos un objetivo claro, que es el ascenso, pero es una semana limpia, después habrá aún mucho tiempo para preparar el partido de Córdoba y éste es un encuentro que ilusiona jugarlo. Sin ser favoritos y evidentemente sabiendo que viene un equipo de Primera división, creo que tendremos nuestras opciones", ha manifestado el futbolista catalán, por fin asentado en la posición de central.
"Personalmente estoy disfrutando este año. Siempre he dicho que no tengo ningún problema en jugar de pivote, es una posición en la que he jugado mucho, sobre todo con este entrenador (Rubi, con quien coincidió en el Betis) y en la que debuté en el fútbol profesional; pero mi posición natural, donde estoy más cómodo, donde he jugado más partidos y donde creo que soy mejor jugador es de central. En los últimos meses, al haber jugado ahí teniendo continuidad y encima con victorias, evidentemente es una temporada que la estoy disfrutando. También, viniendo del año pasado, aún se le da más valor a cada victoria y se disfruta más. Es un reto personal devolver al club donde creo que tiene que estar", ha añadido.
Edgar González llegó al Betis Deportivo procedente del Cornellà en 2018, se estrenó con el primer equipo verdiblanco de la mano de Quique Setién en un duelo ante el Racing de Santander, precisamente en 1/16 de Copa. No obstante, su debut en LaLiga llegó en la 19/20 con Rubi sentado en el banquillo del Benito Villamarín. "Probablemente su llegada ha sido la principal clave. Por su estilo, el equipo es reconocible en una forma de jugar: ser protagonistas, atacar y tener muchas ocasiones, pero sin encajar muchos goles. Este año hay un componente distinto en el tema mental. Han sabido darle la vuelta a la situación de muchos jugadores para volver a tener confianza y volver a disfrutar jugando, que era algo que se había perdido un poco por la situación del año pasado y por cómo empezó este año. Han conseguido que el equipo dé su mejor versión. Está siendo un año muy bonito y queremos disfrutarlo", ha indicado.