Alejandro Sáez5 min lecturaDecía el padre de Ansu Fati, Bori Fati, a declaraciones a ABC que su hijo "está como loco" por jugar en el Sevilla FC. Algo de lo que el propio club y su director deportivo, Víctor Orta, están al corriente. Y no es para menos, pues tal y como ha podido confirmar ESTADIO Deportivo, muchas y diversas han sido las llamadas del progenitor del futbolista a los de Nervión para tratar de darle forma a la operación. No es nada nuevo, pues los contactos se mantienen desde el pasado verano, cuando el padre de Ansu Fati ya trató por activa y por pasiva darle forma a la imposible operación de que Ansu Fati fuera al Sevilla FC en calidad de cedido. Finalmente emigró al Brighton, donde se hacía cargo del 80% de su ficha durante un año de cesión; algo impensable para la delicada economía sevillista, cobrando el internacional español unos 12 millones de euros brutos por temporada; incluso algo más, teniendo en cuenta objetivos.
Como era de esperar, lo económico decantó la balanza hacia la Premier con la clara intención por parte de los azulgranas de que su futbolista brillara en Inglaterra y este verano bien el propio Brighton o algún otro club inglés apostara de verdad por él. Un plan que, sin embargo, no ha cuajado, siendo la realidad de Ansu Fati muy diferente a lo largo de la presente temporada.
Este pasado sábado, sin ir más lejos, Ansu Fati volvió a ser suplente con el Brighton, y ya van ocho partidos consecutivos en la Premier League. Desde diciembre tan sólo ha jugado 210 minutos en la liga inglesa, sin haber visto portería ni haber asistido a ningún compañero. Un rendimiento muy pobre que hasta la fecha se resume en cuatro goles y una asistencia en 28 partidos disputados con la elástica de las 'gaviotas'.
En este contexto, el Sevilla FC vuelve a aparecer con fuerza en el horizonte de un Ansu Fati que se formó como futbolista en la carretera de Utrera y al que las lesiones han lastrado una prometedora carrera. Lo económico, como ya ocurriera el pasado verano, será el único escollo.
Con el beneplácito del futbolista y de su padre, que no deja de llamar tanto a Víctor Orta como al presidente José María del Nido Carrasco para tratar de facilitar la futura operación, todo dependerá de un Barcelona con el que el joven futbolista de 21 años tiene firmado un millonario contrato hasta 2027. En 'Can Barça', donde Ansu Fati permanecería también con agrado, no tiene sitio, por lo que otro año más a la sombra sería la puntilla definitiva para acabar con su carrera.
Al conjunto azulgrana no le queda otra opción que jugársela a una carta, analizando ahora hasta que punto está dispuesto a asumir la ficha del jugador durante un nuevo préstamo. El Sevilla FC, que el próximo curso no competirá en Europa, tiene una situación económica aún más comprometida que el curso pasado, imponiendo un tope salarial para las nuevas fichas de un millón de euros netos. Tratándose de Ansu Fati, quizá podría hacer un esfuerzo y alcanzar 1'5. En cualquier caso, el Barça tendría que asumir el resto y la economía culé tampoco es la más apropiada.
'Novias' con mayor poderío económico y de ligas menores seguro que aparecen para Ansu Fati y el Barça, que en ese caso tendría en contra al futbolista y, sobre todo, a su padre. Bori Fati quiere que juegue en el Sevilla FC, donde tiene claro que podría volver a colocarse en el escaparate. En Nervión le aseguran la titularidad, aunque luego tendrá que ganársela sobre el campo. Si se pone a tiro harán un esfuerzo, pero sin locuras, pues en el Sánchez-Pizjuán también son conscientes de que el futbolista no es demasiado fiable en lo físico. Bori Fati, en cualquier caso, tiene la llave de una operación que en términos económicos sería totalmente inviable. Eso sí, cosas más locas se han visto en el mundo del fútbol en los últimos días de mercado.