Hace cerca de un año, el prestigioso diario francés L'Equipe desveló que Sevilla y Betis habían apuntado el mismo nombre en su agenda para reforzar la delantera y que se avecinaba un derbi en el mercado para hacerse con sus servicios. Se trataba del ariete del Círculo de Brujas, Kévin Denkey, que había explotado en la Jupiler League e iba a camino de convertirse en uno de los arietes de moda en Europa. Por entonces, los dos clubes reforzaron la vanguardia con otros nombres por la dificultad de sacarlo de su club en ese momento, apostando el Sevilla por Alejo Véliz y el Betis, por Bakambu y el Chimy Ávila.
No obstante, los dos clubes hispalenses mantuvieron los ojos puestos en el togolés, que terminó el curso como máximo realizador de su competición con 27 dianas, a la que se sumó la anotada en la Croky Cup y, obviamente, disparó el interés en el panorama internacional. Dentro de la lista de pretendientes permanecieron Sevilla y Betis, hasta el punto de que ambos movieron ficha, cada uno en un momento determinado de la ventana.
Así, Denkey lideró la agenda nervionense a principios de mercado para sustituir a En-Nesyri, si bien pronto se entendió en Nervión que se trataba de un objetivo tremendamente difícil pese a lo que se ingresara por el marroquí. De hecho, finalmente, cerró una incorporación gratis, la de Iheanacho.
En el caso del Betis su nombre reapareció al final de la ventana, dentro de la 'short list' que integraba también a Moukoko y Vitor Roque. Denkey gusta mucho a la dirección deportiva, pero su precio y la opción real de hacerse con los servicios de Vitor Roque clausuraron esta vía.
Denkey se marchará a la MLS
Esto no quiere decir que Denkey saliera de sus agendas, pues encanta a las dos direcciones deportivas, pero el punta mantiene su olfato goleador -suma once dianas- en este curso y en los últimos días se ha producido un movimiento definitivo que obliga a Sevilla y Betis a despedirse de esta posibilidad soñada. Y es que Denkey está a un paso de marcharse a la MLS estadouniense después del acuerdo alcanzado entre el FC Cincinnati y el Círculo de Brujas que asciende a 16,6 millones de euros (15,3 fijos), lo que le convertirá en el fichaje más caro de la historia de la MLS y lo aleja definitivamente del Benito Villamarín y del Ramón Sánchez-Pizjuán, pues esas cantidades son prohibitivas ahora mismo en la capital hispanlense.