Marcao regresaba al once liguero debido a las lesiones de Badé y Nianzou después de haber perdido su rol de titular en favor del parisino y lo cierto es que se erigió en el protagonista negativo del partido por una acción inexplicable que cercenó las opciones sevillistas de meterse en el partido contra la Real Sociedad.
El brasileño derribó con el brazo a la altura del cuello a Martín Zubimendi cuando lo dribló sin apenas trabajo al borde del área. El árbitro del encuentro, Muñiz Ruiz, no señaló nada en primera instancia, pero Trujillo Suárez, encargado de la sala VOR, avisó a su compañero de que revisara la jugada en la pantalla, porque entendía que se había cometido una infracción que se percibía a la perfección en las imágenes.
Una vez confirmado que no había fuera de juego, el colegiado fue a revisar la acción y rápidamente apreció el derribo por parte del brasileño, si bien tardó un poco más porque llegó a pensar imponer un castigo mayor al futbolista sevillista, por si había temeridad en la acción. Así se refleja en la conversación que mantuvieron Muñiz Ruiz y Trujillo Suárez y que la RFEF ha hecho pública a través de sus redes con el audio del VAR.
"Alejandro, te recomiendo una revisión para que valores un posible penalti, por brazo en el cuello, en la cara", advirtió el asistente en el VAR al colegiado, que en directo no había señalado ninguna infracción y que, de inmediato, anunció que se dirigía a la pantalla para determinar lo que había ocurrido. Así, le mostraron la imagen congelada con el brazo de Marcao en el cuello de Zubimendi y después pidió imágenes con más intensidad para discernir si la acción era merecedora de la tarjeta roja.
"Dámela con intensidad que quiero valorar la temeridad de la acción", pidió Muñiz, que, por entonces, ya había decidido que era pena máxima y ofreció más detalles: "El penalti está claro, e, incluso la opción de SPA -cortar un avance prometedor-". Así, una vez realizadas estas apreciaciones, confirmó su decisión: "Para en el punto de impacto, que se ve claramente que es dentro del área el brazo. Penalti y tarjeta amarilla a Marcao", señaló el árbitro, a lo que Trujillo Suárez le contestó: "Correcto, no hay fuera de juego".
Así las cosas, Marcao corrió el riesgo incluso de ser expulsado por esta acción para finalmente ver amarilla, lo que no resta trascendencia a su error, que supuso el 2-0 definitivo. García Pimienta lo retiró del terreno poco después y no se calló en la rueda de prensa: "Un jugador de su experiencia, la verdad es que no debería equivocarse de esa manera".