José Antonio Rivero3 min lecturaSantiago Solari, figura inolvidable en la historia reciente del Real Madrid, ha conseguido el ascenso que tanto quería en el Santiago Bernabéu, esta vez como responsable del área de fútbol. Considerado "un hombre de club", esos que tanto gustan a Florentino Pérez, Solari dejaría su marca por tercera vez en el equipo merengue, después de haber vestido la camiseta como jugador y haber dirigido al conjunto blanco desde el banquillo.
Su primer capítulo en el club blanco se escribió como jugador, cuando defendió la camiseta del Real Madrid durante cinco temporadas, desde la 2000-01 hasta la 2004-05. En este periodo, disputó un total de 208 partidos, dejando su huella con 22 goles. Solari se convirtió en un elemento clave en el equipo, consolidándose como un referente en el terreno de juego.
El vínculo entre Solari y el Real Madrid se fortaleció aún más cuando asumió el rol de entrenador durante la temporada 2018-19. Sin embargo, esta etapa estuvo marcada por altibajos, con 32 partidos en el cargo y un balance de 22 victorias, 2 empates y 8 derrotas. Aunque no alcanzó el éxito esperado, su compromiso y pasión por el club fueron innegables.
La carrera de Solari no se limita a los terrenos de juego españoles. Inició su trayectoria en River Plate en 1996 y, tras pasar por el Atlético de Madrid, llegó al Real Madrid en 1999. Después de su exitoso paso por el equipo blanco, continuó su carrera en el Inter de Milán (2005-08) antes de regresar a Argentina con el San Lorenzo de Almagro (2008-09). Además, exploró el fútbol mexicano, dirigiendo al Club América entre 2021 y 2022.
La transición de Solari de jugador a entrenador comenzó en las filas del Real Madrid Castilla, el equipo filial. Desde allí, dio el salto al primer equipo, guiándolo a la victoria en el Mundial de Clubes de la FIFA en 2018. Su capacidad para liderar y su comprensión del juego lo llevaron a dirigir en el fútbol mexicano, dejando su impronta en el Club América.
El regreso de Solari al Real Madrid, ahora en el área de fútbol, despierta la emoción de los aficionados que recuerdan su dedicación y amor por la entidad. Su experiencia como jugador y entrenador, combinada con su profundo conocimiento del club, podría ser un activo valioso en este nuevo rol. La historia entre Santiago Solari y el Real Madrid aún podría tener capítulos emocionantes por escribir.