José Ronquillo3 min lecturaIker Bravo se ha estrenado este miércoles como goleador en la Serie A italiana. El ariete español se ha destapado como una de las grandes sorpresas de Udinese contra el Venecia. En las últimas semanas, el ex futbolista del Real Madrid está creciendo mucho como jugador profesional, y ya acumula ocho partidos seguidos vistiéndose la casaca del conjunto italiano. Además, en los últimos tres choques ha tenido la oportunidad de ser titular en dos encuentros.
El desempeño del joven Iker Bravo en 'La fábrica' del Real Madrid dejó muchas dudas sobre su potencial como delantero de élite. Sin embargo, el atacante de Sant Cugat está poco a poco abriéndose paso en la escuadra de Italia. En el club blanco confiaban en el gran potencial del jugador, pero su pobre paso por el juvenil y por el Real Madrid Castilla le llevaron a abandonar el barco.
Iker Bravo, de 19 años, ha disputado este curso ocho encuentros con la elástica de Udinese y poco a poco comienza a mostrar todo su potencial. El ex canterano de FC Barcelona, Real Madrid, o Bayer Leverkusen parece volver a encontrar su lugar en el panorama futbolístico. No obstante, todavía es pronto para dilucidar su futuro en el fútbol italiano. Un golazo anotado contra el Venecia en la Serie A lo ha situado de nuevo en el escaparate.
Iker Bravo no logró ganarse un puesto como titular en el Real Madrid Castilla de Raúl González Blanco. El de Sant Cugat dejó pinceladas de su calidad, pero nunca destacó por su regularidad sobre el terreno de juego. Aterrizó en Madrid como una auténtica estrella, y la afición blanca le auguraba un gran futuro en la entidad madrileña tras su paso por la masía. Sin embargo, su paso por el Madrid no fue fácil y no se terminó de asentar en el club. En el Bayer Leverkusen vivió una situación similar al tratar de pelear por un puesto en el primer equipo alemán. La calidad del '9' español siempre ha estado latente, y parece que comienza a brillar lejos de Valdebebas. El Real Madrid realizó una fuerte apuesta de futuro por Iker Bravo, pero el delantero pasó gran parte de la temporada condenado al banquillo en 'La Fábrica'. Ancelotti tampoco contó demasiado con el atacante para subir a entrenar con la primera plantilla.
