Álex Martín4 min lecturaDavid Alaba, poco a poco, va dando pasos hacia delante en su recuperación, algo de lo que está muy pendiente un Real Madrid que quiere contar con todos sus efectivos cuanto antes. A pesar de que, en algunos momentos, había ciertas dudas sobre la fecha de vuelta del austríaco, lo cierto es que el trabajo que viene realizando desde hace meses está siendo recompensado. Una de las señas más claras, durante el entrenamiento a puerta abierta que ha realizado el conjunto dirigido por Carlo Ancelotti antes de que termine un 2024 lleno de luces para la entidad que suele disputar sus encuentros en el Santiago Bernabéu.
En esta última sesión, Alaba, a quien se le ha podido ver con una gran sonrisa en su cara, ha podido saltar al césped de Valdebebas para ejercitarse junto al resto de sus compañeros. Ante cerca de 6.000 personas, que desafiaron al frío para ver en acción a sus ídolos, tuvieron la oportunidad de observar las evoluciones de un defensor que quiere volver cuanto antes y ser, de nuevo, una pieza clave para un Ancelotti que quiere seguir cogiendo buenas sensaciones para la segunda mitad de una temporada que se prevé de lo más exigente.
A pesar de que, como suele ser habitual en sus casos, no se va a correr ningún riesgo con él, lo cierto es que Alaba tiene muy claro que quiere volver a contribuir cuanto antes a un Real Madrid que debe seguir creciendo en todas las competiciones para encontrarse con su mejor versión. En esta sesión, ha dado un paso de gigante, ya que se le ha podido observar a buen ritmo, lo cual es una gran noticia para un club que le espera con los brazos abiertos. Más, tras la grave lesión que ha sufrido en el último año, y que le ha quitado muchos días de su trayectoria en la Casa Blanca.
En esta sesión, como se viene comentando, Alaba se ha podido entrenar a un buen nivel, llegando a asentarse en un grupo en el que han hecho acto de presencia jugadores como Vinicius, Bellingham, Endrick, Mendy o Valverde. Durante el partidillo, el austríaco, a quien le tocó llevar peto verde, tal y como recuerda As, ha podido jugar como pivote. Después de esto, acompañado por el preparador físico, trabajó en su velocidad, un punto siempre a tener en cuenta acerca de alguien que quiere dar varios golpes de autoridad a su vuelta de los terrenos de juego.
Como suele ser habitual en estos casos, los seguidores merengues, en especial los más pequeños, pudieron disfrutar de una sesión en la que sus ídolos hicieron las delicias de todos los que acudieron a la ciudad deportiva blanca. Eso sí, no estuvo exenta de sustos, ya que Endrick tuvo que retirarse cojeando de forma ligera, algo que puede hacer saltar las alarmas dentro de un conjunto que no puede llevarse más sustos en este aspecto. Después de que los jugadores firmaran autógrafos y se hicieran fotos con los asistentes, así acabó el año para un Real Madrid que busca seguir dominando con puño de hierro tanto en España como en Europa.