Anda muy contento Javier Aguirre, lógicamente. Y es que su RCD Mallorca es flamante finalista para disputar la final de la Copa del Rey en el Estadio de La Cartuja de Sevilla. Un premio a una trabajada temporada que en LaLiga, sin embargo, no ha sido tan brillante para los bermellones.
Aunque todo indica que la lucha por la permanencia será cosas de otros, el mexicano y los suyos saben que no pueden distraerse en exceso con la final copera, estando los puntos que marcan el descenso a tan sólo cinco puntos de distancia. En cualquier caso, andan felices por Mallorca, como el propio Aguirre reconocía tras la derrota ante el Barcelona. "Me preocupaban las dos áreas. Ahora, en la nuestra estoy muy tranquilo. En el último tercio nos falta tranquilidad y tomar buenas decisiones", decía el mexicano, aunque la realidad dice que su equipo tan sólo ha marcado un gol menos que el curso pasado a estas alturas de la competición y ha encajado cinco tantos más. En cualquier caso, ha empeorado en ambas partes del terreno de juego.
El Mallorca se ha ido sin ver portería en 12 de los 28 partidos de LaLiga que ha disputado. Al mismo tiempo, tan sólo ha sido capaz de dejar su portería a cero en uno de los últimos once partidos.
Hablar de Vedat Muriqi como un 'problema' para el Mallorca de Aguirre suena a sacrilegio, pero tiene su explicación. El curso pasado, el kosovar marcó prácticamente uno de cada dos goles del conjunto balear. 12 de los 25 goles mallorquinistas a diez partidos del final de curso eran suyos. Este año, sin embargo, tan sólo suma cinco.
Lógicamente, el bajón de rendimiento de cara a gol tiene una explicación lógica. Por un lado está la lesión en el gemelo que le ha mantenido lejos del verde casi dos meses y por otra parte los dos penaltis que erró a inicio de curso, lo que ahora subiría su suma a siete dianas, de haber visto puerta desde los once metros.
En cualquier caso, el dato es alarmante, pues Muriqi firmó el curso pasado solo el mismo número de goles que éste entre los tres delanteros del Mallorca: Larin, Abdon y Muriqi. Especialmente preocupante es el caso de Larin, que llegó en verano como uno de los fichajes estrella de los insulares y tan sólo suma dos tantos en LaLiga esta temporada.