Aitor Torvisco10 min lectura
Betis
Finalizado2 - 3Rangers FC
El Real Betis dependía de sí mismo no sólo para pasar a la siguiente ronda de la UEFA Europa League, sino para hacerlo además como primero del Grupo C. Malgastó su primera bala al caer por la mínima en Praga ante el AC Sparta y, pese a ello, llegó a la última jornada como líder y con la baza de jugársela ante el Rangers FC en su casa, en un Benito Villamarín invicto en 11 partidos de esta temporada. Petardazo. De los gordos, además. Los escoceses no necesitaron nada del otro mundo para hacer pasar a los verdiblancos de la cima a la Sima, autor del 0-1 y verdugo heliopolitano en esta edición del torneo. De primero de grupo y pase directo evitando rival de Champions, a ser tecero, irse con el gesto torcido y con las evidentes costuras más a la vista que nunca.
No es que echase de menos a Guido Rodríguez, a Nabil Fekir o a Chadi Riad, es que incluso se añoró hasta a los poco habituales Sergi Altimira o Sokratis (Pellegrini ni agotó cambios). El 2-3 final es una derrota de las que minan la moral. Toca cambiar de taza y pasar el trago. Quién sabe si la UEFA Conference League es ésa puerta hacia un título europeo que tanto se anhela en La Palmera. Eso sí, los sueños, a partir de mañana (o del lunes). Hoy es imposible despertar de esta decepcionante pesadilla.
La primera mitad fue de esas que se dicen entretenidas para el espectador, pues no paran de suceder cosas reseñables; pero odiadas por los entrenadores, pues eso significa que no logra hacerse con las riendas. El Betis presentó una buena puesta en escena a nivel de activación, pero el Rangers FC echó varios jarros de agua fría para templar los ánimos. En el 10', en la primera llegada, hizo el 0-1. Despeje apurado de Rui Silva que Miranda no logra alcanzar y que ya pilla descolocada a la defensa del Betis. Marc Roca no salta y el hueco del lateral lo tiene que cubrir Pezzella corriendo desde el perfil diestro, zona a la que Bellerín no llegó a tiempo de cubrir ni de tapar el disparo de Sima. Marcó en Glasgow, en la primera jornada y advirtió el miércoles en rueda de prensa que llegaba al Benito Villamarín convencido de poder marcar de nuevo. Cumplió su amenaza, pues en ese momento hacía pasar al Betis de la cima a la Sima.
Reaccionaron bien los de Pellegrini, que en la acción siguiente rompieron por la izquierda en una conducción de Ayoze, que fue doblado por fuera por Miranda, cuyo centro raso al segundo palo no fue alcanzado por muy poco por un Assane Diao que se lanzaba con todo. El 0-1 fue en el 10', esa primera respuesta llegó en el 12' y en el 14' llegó el empate. De nuevo la acción nació en la banda zurda. Allí se asociaron de nuevo Ayoze y Miranda, con participación estelar de Borja Iglesias para filtrar de primeras el balón y dejar al lateral zurdo solo delante de Butland, al que batió con un certero zurdazo para devolver la calma al encuentro. La reacción fue proporcional a la exigencia requerida. Con Miranda como hiperactivo desfibrilador, Borja Iglesias la estrelló contra un defensor tras una potente arrancada de Assane, Bellerín se topó con un paradón de Butland y Guardado estrelló un zapatazo en el larguero.
Sin embargo, dos desacoples se tradujeron en dos llegadas del Rangers y en dos goles. En un saque de banda en el centro del campo, el Betis dejó mucho espacio a su espalda y Sima (todo lo hacía bien) lo explotó con un servicio filtrado para que corriese Dessert, que sentó en el área a Marc Roca (sufre muchísimo de central) y batió a Rui Silva con un cañito. Todo eso, en apenas 20 minutos. El 1-2 era preocupante, ya que el AC Sparta de Praga ganaba 0-2 al Aris Limassol en sólo 11 minutos, por lo que el resultado mandaba momentáneamente al Betis a la Conference League.
Sin Guido y con Marc Roca tan atrás, a Isco no le llegaban balones. El ritmo pasaba por encima a Guardado y a un William Carvalho que jugaba su primer partido de titular tras casi un mes de lesión. Pellegrini buscaba vías para que el malagueño entrase en contacto con el balón, adelantando (e internando) a Bellerín, dejando a Assane casi en paralelo con Borja y haciendo que el '22' retrocediese más atrás para dar fluidez a la salida. El Rangers, a lo suyo, permanecía arropado e intentaba correr, aprovechando la fractura de las líneas de los locales, con más corazón que cabeza.
Tenía que ser Isco el que pusiese cordura. Se movió de un lado a otro, comenzó a intervenir con frecuencia y el Betis lo notó. El 2-2 nace de un derroche de fe en la presión de Assane, bien acompañado por Borja, que fue quien la recuperó y se la dio al 'Mago', que llevó la pelota hasta el balcón del área pegada al pie antes de dársela con el exterior a Ayoze para el disparo angulado del tinerfeño que devolvía las tablas a falta aún de ocho minutos para el final de un frenético primer tiempo. Golazo y nuevo soplido. Al descanso, el empate no gustaba a ninguno. El Betis era segundo de grupo y el Rangers, que se había adelantado dos veces, tercero; con liderato para el AC Sparta (0-3).
La segunda mitad arrancó con una nueva lectura. El paso por vestuarios dejó a los de Pellegrini mejor acompasados en esos movimientos de acordeón que siempre rompía alguien en el primer acto. Isco estrelló otro remate en el travesaño, Marc Roca pisó el balón en lugar de rematar en otra acción a balón parado, a Ayoze le anulaban el doblete porque empujó con el brazo un balón repelido por Butland tras un cabezazo de Pezella. Había menos hiperactividad, la puesta en escena era menos explosiva y generaba menos peligro, pero las circulaciones de balón eran más fluidas, las posesiones eran más largas y no se llevaba tantos sustos atrás.
El que estaba fuera era el Rangers y por lo tanto le correspondía arriesgar. Lo hizo Phillipe Clement metiendo más efectivos de ataque en el campo y, uno de ellos, Roofe, aprovechó un balón suelto con Marc Roca rompiendo el fuera de juego para batir a la media vuelta a Rui Silva y dar otro mazazo con el 2-3. Ahora, el tercero de grupo volvía a ser el Betis, con el tiempo en contra y ya sin ese vértigo del inicio del choque. Pezzella acabó de '9' buscando cazar algún cabezazo e Isco derrochó sus últimas energías para disparar desde lejos en el quinto y último minuto de alargue. Fue lo único que pudo generar un equipo golpeado en su orgullo.
2- Real Betis: Rui Silva; Bellerín (Aitor Ruibal 82'), Pezzella, Marc Roca, Miranda; Guardado, William Carvalho (Luiz Henrique 82'); Assane Diao (Abde 70'), Isco, Ayoze; y Borja Iglesias (Willian José 70').
3- Rangers FC: Butland; Tavernier, Goldson, Davies, Barisic; Lundstram, Cifuentes (Sterling 46'), Lammers; McCausland (Matondo 65'), Dessers (Roofe 65') y Sima.
Árbitro: Srdjan Jovanovic (serbio). Amonestó a los locales Isco y Marc Roca y a los visitantes Lundstram, Tabernier y Roofe.
Goles: 0-1 (10') Sima; 1-1 (14') Miranda; 1-2 (20') Dessers; 2-2 (37') Ayoze; 2-3 (78') Roofe.
Incidencias: partido correspondiente a la jornada 6 en el Grupo C de la UEFA Europa League disputado en el estadio Benito Villamarín de Sevilla ante un total de 48.380 espectadores.