Jesús Galiano3 min lecturaEste domingo a las 14:00 horas podría revivirse algo muy especial en el Estadio Carlos Tartiere, en la que sería la vuelta de Michu al campo donde tantas alegrías dio a la afición oviedista. El Oviedo recibe a un Burgos en estado crítico tras seis partidos consecutivos sin ver la victoria (cuatro derrotas y dos empates), lo que desde la dirección deportiva burgalesa han tomado la decisión de prescindir de Jon Pérez Bolo y que Michu, director deportivo del club, tome las riendas del equipo de forma momentánea hasta encontrar un nuevo entrenador. Por ello, para la afición del Real Oviedo es un encuentro con mucho significado, porque vuelve Michu a la que fue su casa durante tantos años y donde creció como futbolista.
Con el objetivo de entrar en los puestos de 'playoff' durante esta campaña, los de El Plantío están pasando por una mala racha de resultados que lo aleja claramente del deseo marcado a comienzo de temporada pese al buen arranque liguero, estando el equipo en puestos de playoff hasta la jornada siete, pero desde aquel momento, el equipo cayó en picado y solo consiguió resultados negativos que lo han llevado al borde de los puestos rojos de la clasificación de La Liga Hypermotion. Las lesiones de futbolistas como Kevin Appin o Álex Sancrís han influido claramente en el rendimiento del equipo, que desde la baja de estos dos jugadores, el cuadro burgalés no ha parado de enlazar malos resultados.
Después de su retirada en la campaña 16/17 por sus problemas físicos, Michu volvió al fútbol tras un año sabático, concretamente entró al Langreo como director deportivo. Estancia corta para el ovetense ya que a los pocos meses le surgió la opción del Real Oviedo, que lo contrató como secretario técnico. Tras siete meses en la organización técnica del conjunto asturiano, decidió dimitir tras los problemas interinos que existía en el club.
Ahora mismo el icono ovetense está en su cuarta temporada al frente de la dirección deportiva del Burgos, habiendo conseguido objetivos impensables desde su llegada: regresar a la categoría de plata del fútbol español y mantener al equipo en la competición durante cuatro años consecutivos. Ahora, tras destitución de Jon Pérez Bolo por los últimos resultados, en el club ha apostado por la figura de un mito del Real Oviedo, equipo al que se enfrentan este mismo fin de semana para encarar el importante duelo en el Carlos Tartiere.