Contra pronóstico, el Real Betis busca laterales derechos también en el mercado, como demuestran los sondeos por el almeriense Marc Pubill o el sportinguista Iván Fresneda. Y eso pese a que tiene en plantilla a Youssouf Sabaly, Héctor Bellerín y Aitor Ruibal. La idea verdiblanca es quedarse con los dos catalanes, devolviendo al de Sallent a su posición natural de extremo, quedando como apagafuegos más que como opción natural, y vender al franco-senegalés, con recorrido en la Ligue 1 tras su etapa en el Burdeos. Los heliopolitanos esperan ingresar entre tres y cuatro millones de euros por el de Chesnay, con dos años más de contrato, y reinvertirlos en un carrilero más joven y revalorizable. Como apuntaban esta semana desde Palma de Mallorca, el que más gusta es Pablo Maffeo (26), objetivo igualmente del Sevilla FC y el Oporto, y que disparó los rumores por su presencia estos días en la capital hispalense, aunque sólo de vacaciones.
Fuentes de la operación tildan el posible fichaje del hispano-argentino como "viable, pero complicado". La capacidad de inversión en el Benito Villamarín es limitada y muy condicionada a las ventas, por lo que habría que rebajar las exigencias iniciales del RCD Mallorca, dueño de los derechos del de Sant Joan Despí hasta el 30 de junio de 2026. En Palma entienden que su futbolista cuesta entre cinco y ocho millones de euros, pero el Betis, que reinvertiría lo recaudado por el ex del Girondins y trataría de abaratar el traspaso incluyendo cesiones. Queda prácticamente descartado que Ez Abde forme parte de un hipotético trato, pues ni el marroquí ni la entidad ven conveniente separarse; llegado el caso, se priorizaría una venta por una cantidad de dos dígitos, teniendo en cuenta que su adquisición desde el FC Barcelona costó 7,5 kilos por la mitad del pase.
Bien es cierto que la llegada a la isla de Jagoba Arrasate es un aliciente para el de Beni Melal, que brilló a sus órdenes en el CA Osasuna hace dos temporadas, pero no habrá intercambio, trueque ni nada por el estilo. Pero el interés del Betis por Maffeo es real y manifiesto, hasta el punto de que solamente ellos y el Oporto han hecho los deberes y se han posicionado. Pablo, que lleva tiempo queriendo abandonar el conjunto bermellón y ya ha verbalizado que su ciclo allí ha terminado, para enfado de gente de peso balear, conoce la opción verdiblanca y le gusta, aunque deberá tener paciencia. El primer objetivo en Heliópolis pasa por llegar a la regla 1:1, que facilitaría las cosas para rearmar el plantel.