La 'guantá' sin mano del 'Chimy' al público de El Sadar

Pidió perdón a una grada que le recibió de uñas por si molestó su celebración, aunque pide empatía: "Venía con otra ilusión, pero no guardo ningún rencor; seguiré siempre enamorado de Osasuna y su gente"

La 'guantá' sin mano del 'Chimy' al público de El Sadar
La carrera del rosarino para festejar el 1-2 definitivo en su antigua casa. - RBB
Óscar MurilloÓscar Murillo 5 min lectura
Osasuna

Osasuna

DAZN LaLiga Finalizado1 - 2

Betis

Betis
GolLucas Torró59'
GolVitor Roque 7' GolChimy Ávila 73'

No fue una tarde fácil para Ezequiel Ávila. A diferencia de su compañero Ez Abde, que cumplió y descolló durante su cesión en Pamplona de la 21/22, él fue recibido con pitos de un amplio sector de la grada de El Sadar, que no le perdona que forzara para salir el pasado mes de enero en dirección al Real Betis. Atrás quedaron dos graves lesiones de rodilla y, pese a ellas, cuatro años y medio de comunión y rendimiento (29 goles y diez asistencias), que pesaron más para el atacante que el hostil recibimiento. "Es una mezcla de sensaciones. Ya saben el cariño y el amor que siento por la afición, lo bien que lo pasamos acá. Estoy un poco desilusionado por los pitidos y por los insultos, pero entiendo cómo funciona el fútbol. No guardo ningún rencor, sino que seguiré siempre enamorado del CA Osasuna y de su gente, pero me partió el corazón de lo 'Chimy, muérete'", apuntaba el '9' en DAZN. Una 'guantá' sin mano en toda regla.

Por si la grada se molestó por su festejo en el 1-2, a pesar de que lo recibió de uñas desde que entró tras el descanso, el rosarino continuó con la diplomacia y la humildad: "No sé si fue una celebración de emoción o de tristeza. Si la gente lo tomó así, pido perdón, pero pido a la gente que se ponga en mi sitio. Volvía a una ciudad que uno ama tanto, que mi familia ama tanto, en la que nació mi hijo, y que te reciban así... Venía con otra ilusión; durante toda la semana estuve explicándole a mis hijas que a su papá lo iban a aplaudir. Salió mal en ese sentido, pero, por otra parte, me voy feliz por que el Real Betis se va con los tres puntos de una cancha tan importante como ésta". Lo afirmaba con una media sonrisa, más de resignación que otra cosa, tras dedicar el tanto a la parte del estadio ocupada por los más de 500 béticos presentes y contenerse luego con sus compañeros.

Sobre su broma con Sergio Herrera en la acción del alargue en la que se quedó sin ángulo y trató de sorprenderle de tacón, el argentino se mostró más relajado, incluso con bromas de sus ex compañeros en zona mixta: "Me gritaba 'Guachín, te conozco'... Lo quiero mucho. Él es parte de mi carrera por los consejos que me daba, las noches en las concentraciones... Acabo de salir del vestuario de Osasuna y me voy con abrazos, porque, más allá de lo que se vea fuera, dentro somos una familia". Por supuesto, la conversación posterior con los medios oficiales del club bético fue en otro tono, mostrándose "contento por marcar, por convertir y por que le regalamos una alegría a la afición, que siempre está con nosotros, en todos los momentos, en un campo tan difícil como éste. La victoria se la dedico a mi familia. A mi mujer, mi hijo, mi padre y mi madre, que estuvieron en la grada y se pusieron tristes con los insultos que escucharon. Va para ellos y para cada uno de los béticos que vinieron. Buen viaje de vuelta para todos".

Se acordaba el 'Chimy' de "todos los compañeros, los que han jugado, los que no lo han hecho y los que se han quedado en casa", porque ve el 1-2 como un triunfo comunal: "Todos nos hemos sacrificado, nos teníamos que dejar la vida por esta gente que ha venido haciendo tantos kilómetros. Ha sido un alivio para nosotros y una recompensa para la gente. La gente que me ha aplaudido y la que no lo ha hecho me han servido de inspiración. Nos ha ayudado escuchar las voces de los béticos, que se han hecho sentir, y mira que es difícil es un campo como éste. Ellos también me han servido para ir en busca del gol". Un tanto de estrategia: "Captamos el trabajo, las herramientas que nos dio para ese tipo de jugadas el míster, pero también Fernando, Cousillas y Alexis, que nos dicen siempre que la hagamos, que la hagamos. Muy contento por eso. Hay que celebrar, pero también poner la cabeza en el próximo partido en casa. Quedan muchos por delante".