Manuel Pedrero3 min lecturaLa partida de D. Manuel Ruiz de Lopera encogió el corazón al mundo del fútbol y al beticismo en particular. Su figura carismática acompañará siempre al Real Betis Balompié. Presente en el club desde la década de los 90 hasta 2010, el club logró un titulo copero en 2005 y llegó a participar el año siguiente en la UEFA Champions League. Pero el de la calle Jabugo tenía otra gran pasión en su vida: la Semana Santa y su devoción por las imágenes. Muy vinculado a la hermandad de El Gran Poder, acudía cada viernes a la plaza de San Lorenzo para venerar al Señor de Sevilla. Muchos detalles tuvo el expresidente con cofradías de la ciudad. Esta madrugada (si Dios quiere) la Virgen María Santísima del Mayor Dolor y Traspaso estrenará un precioso manto donación del malogrado exdirigente verdiblanco.
Las aportaciones de Ruiz de Lopera a la Semana Santa de Sevilla son innumerables. Sin ir más lejos, la Virgen María Santísima del Mayor Dolor y Traspaso de la Hermandad del Gran Poder estrenará esta madrugada un manto azul donado por el expresidente. Con 100 kilos de oro, es una muestra más de la implicación y fervor de su persona.
El Gran Poder era parte de su vida. Siempre lo llevaba en la solapa de su chaqueta y en su domicilio tenía un busto a tamaño real. Hermano desde hace más de 50 años, la Virgen del Mayor Dolor y Traspaso sacará este 2024 el manto donado. Tras años sin hacerlo, la hermandad sacaba el bordado por Juan Manuel Rodríguez Ojeda. Allá por el año 1991, donó también un manto azul sobre terciopelo, diseño de Antonio Garduño y realizado en el taller de Fernández y Enríquez de Brenes.
Pero la hermandad de El Gran Poder no es la única que ha se ha beneficiado de sus donaciones. La Milagrosa, de Ciudad Jardín y que realiza estación de penitencia el Sábado de Pasión, vio como Lopera sufragó la ampliación de la puerta de la parroquia para que la cofradía pudiera salir con más comodidad. En el año 1996 financió la reforma de la Parroquia de San Lorenzo, en problemas serios de cierre, y se encargaba de pagar las flores del Cautivo de Pío XII.
También su familia era activa en la Hermandad de San José Obrero, que también salió a la calle este pasado sábado. Una cofradía muy cercana a su domicilio en la Calle Jabugo. En verano, Lopera se dejaba ver en la localidad gaditana de Chipiona, donde tenía casa. Era devoto de la Virgen de Regla, la patrona del pueblo.