El calvario de Lainez y sus consecuencias para el Betis

No ha marcado ni asistido en quince partidos con Tigres, acumulando apenas 500 minutos y decepcionando a los aficionados del club de Nuevo León, que llegó a un acuerdo de cesión hasta el 31 de diciembre de 2023

El calvario de Lainez y sus consecuencias para el Betis
El extremo, durante un entrenamiento reciente. - @TigresOficial
Óscar MurilloÓscar Murillo 5 min lectura

Diego Lainez no arranca. Lleva ya casi tres meses en Nuevo León, con 15 partidos a sus espaldas, pero no ha marcado ni asistido en todo este periodo. Poco más de 500 minutos ha jugado el de Villahermosa, que acumula críticas de su afición y 'memes' en las redes sociales mientras busca una redención que, de paso, funcione como punto de inflexión. El 'Diario Olé' recordaba recientemente que acumula 22 encuentros sin ver puerta, contando su etapa en Portugal con el Sporting de Braga. Un frustrante regreso a México tras un decepcionante salto a Europa que se traduce en sólo tres titularidades en la Liga MX (las dos últimas, cambiado al descanso) y una en la Champions de la Concacaf. En este último torneo internacional no ha creado ocasiones ni tirado a puerta, aunque sí dio cinco pases clave, como en el campeonato regular, donde, al menos, disparó tres veces entre palos. Sin duda, un bagaje parco.

Las perspectivas para el extremo son tan poco halagüeñas como la de su actual club, Tigres, con una de las tres plantillas más caras del país norteamericano, pero fuera de los 'play off' por el título. Los auriazules han sumado únicamente cuatro de los últimos 18 puntos en juego, lo que los ha relegado a la séptima plaza. Al menos, las cosas le van mejor en la 'ConcaChampions', donde han alcanzado las semifinales y van ganando por 2-1 a los vecinos de León en la ida. Con participación decreciente del zurdo, que sí tuvo 80 minutos en tierras hondureñas ante el Motagua, pero que ni siquiera participó en la goleada de la vuelta. Y eso que el uruguayo Robert Siboldi, que sustituyó como entrenador a Marco Antonio Ruiz (a su vez relevo interino del argentino Diego Cocca, nombrado seleccionador azteca) hace menos de tres semanas, parece decidido a que Lainez explote, bien en banda o como segundo punta, junto a Guignac.

Mientras tanto, en la planta noble del Benito Villamarín están relativamente tranquilos, si bien, como es lógico, preferirían que el rendimiento de Diego se disparase. Con todo, el trato alcanzado en el pasado mercado invernal no corre peligro de frustrarse, aclaran a ESTADIO Deportivo. De hecho, el traspaso se convirtió a última hora en una cesión con opción de compra que se convertiría en obligación según unos parámetros de participación no ligados a su productividad, sino a la acumulación de minutos entre el Clausura y el Apertura. Es verdad que lleva pocos, pero, al parecer, la exigencia era bastante baja, una mero trámite, por lo que el atacante, contando al modo europeo, estará a préstamo once meses (hasta el 31 de diciembre de 2023) y, a partir de entonces, quedará ligado a Tigres otros tres años y medio, hasta el 30 de junio de 2026.

En cuanto a los réditos que dejará el zurdo, como se desgranaba en la información de esta casa justo antes de que cambiara la fórmula del acuerdo, los de la UANL abonaban este año alrededor de un millón de euros, más otros dos en el siguiente plazo y otros tantos más al año siguiente, quedando una cantidad idéntica en forma de bonus que sí pueden quedar en entredicho si Lainez no marca ni asiste, aunque dependían también de su presencia con la selección mexicana, de momento asegurada tras la marcha de Martino. Hay que recordar que Tigres comprará el 65% de los derechos, pues el Betis ha querido conservar un 20% por si hubiera una futura venta (apenas tiene 22 años) y otro 15% sigue en propiedad de sus formadores, el Club América.