Dani Alves ha vuelto a Barcelona. El lateral derecho está entrenando con el filial del Barça, que dirige el mexicano Rafa Márquez.
El futbolista brasileño, de 39 años de edad, se ha convertido en la gran atracción del Barça B, equipo con el que entrena hasta que Tite de la lista para el Mundial de Qatar.
Alves y Márquez coincidieron en el primer equipo azulgrana durante dos temporadas, desde 2008 hasta 2010, en las cuales ganaron una Champions League, dos ligas, una Copa del Rey, una Supercopa de Europa, una Supercopa de España y un Mundial de Clubes.
El lateral todavía tiene contrato con el Pumas UNAM del fútbol mexicano, aunque entrena con el filial azulgrana porque la temporada en Mexico terminó.
Rafael Puente, presentado este viernes como nuevo entrenador de Pumas, afirmó que cuenta con el brasileño para el torneo Clausura 2023.
"Dani Alves está considerado para este proyecto, él tiene contrato, pero aún no hemos hablado, ya platicaremos más adelante con él y sus compañeros para el arranque de este torneo", afirmó Puente en su presentación.
El vicepresidente deportivo del conjunto mexicano, Miguel Mejía Barón, también habló sobre la relevancia de Alves, el futbolista con más títulos de la historia, en el equipo.
"Dani Alves es un tipo ejemplar, influyente y profesional. Tiene contrato con nosotros y lo esperamos aquí porque tengo la confianza de que Rafael podrá aprovecharlo para que Dani nos deje muchas cosas como escuela", explicó Mejía Barón.El futbolista de Pumas valoró el nivel de la selección mexicana para Qatar 2022, comparándola e igualándola a Brasil. "México y Brasil son lo mismo, y ellos (los críticos) las consideran ligas diferentes. No sé por qué, porque estuve en las dos y sé que es lo mismo", dijo Dani Alves.
Sobre su fichaje por Pumas y su experiencia en el fútbol mexicano, Alves aseguró que "quería vivir, sentir esta experiencia (de jugar en México). Conocía muy bien la liga italiana, la liga española, la francesa, la brasileña. Y la escuela mexicana de futbol es algo que me encanta".
El brasileño confesó que su primer torneo en la Liga MX no fue como esperaba debido a su adaptación. "Por el poco tiempo que tuve creo que el rendimiento individual fue bueno, aunque el colectivo no. Llegué y a los tres días ya estaba jugando. No hice pretemporada, no sabía bien, y en dos meses pasó todo. Sabía que sería un campeonato difícil, con partidos en altura, adaptándome a una cultura diferente. Pagué un precio por eso", explicó.