El pasado mes de junio, Iker Muniain decidió declinar una oferta de renovación para seguir en su equipo de toda la vida en pos de emprender nuevas aventuras que le han llevado a cruzar el charco para cumplir su sueño de conocer por dentro el fútbol de Argentina. Por fin, después de mucho trasiego e incertidumbre, en la madrugada de este 7 de septiembre por fin se ha hecho oficial su fichaje por el Club Atlético San Lorenzo de Almagro, donde se ha encontrado con un sentimiento 'athleticzale' que no le dejará olvidar su corazón de león. Se puede decir que Muniain ha dejado el Athletic, pero el Athletic no le ha dejado a él. Aún queda algo pendiente entre ambos.
Después de una primera visita en la que estuvo tres días conversando con varios clubes, el futbolista de 31 años regresó a Buenos Aires el pasado miércoles, fue aclamado a su llegada al aeropuerto de Ezeiza y se hartó de firmar autógrafos tanto en la terminal como a la salida de la clínica en la que fue sometido al preceptivo reconocimiento médico. Pasó las pruebas con éxito total, pero aún ha tenido que esperar 48 horas más para que los rectores de San Lorenzo solucionaran unos pagos económicos pendientes con la FIFA para poder inscribirle. Por fin, la pasada madrugada las redes sociales del 'Ciclón' daban oficialidad al fichaje con varias publicaciones del todo llamativas y con constantes guiños a Euskadi y al Athletic.
Para anunciar que Iker Muniain era nuevo futbolista de San Lorenzo, el club argentino preparó un bonito vídeo en el que ensalzó la historia vasca escrita en Boedo. Con 'voz en off', Muniain envía un emocionante mensaje al fallecido Isidro Lángara, apodado el 'Vasco', un letal delantero natural de Pasajes que en medio de sus dos etapas en el Real Oviedo disputó cuatro temporadas como azulgrana (1939-1943) y dejó una huella imborrable. "Vasco, llevo poco tiempo aquí, en Argentina, pero te cuento que me hablaron de ti. Me dijeron que viniste huyendo de la guerra, que dejaste a tu familia, que estabas solo y que no te conocía nadie. Me contaron que al bajarte del avión te dijeron 'Dale, que entras' y en tu debut metiste cuatro goles", arranca entre imágenes del recordado jugador guipuzcoano.
"Escuché que te aplaudían gente de traje y corbata, que hacía crujir los tablones y que ibas a meter 110 goles en total para escribir tu historia. Sé que Boedo fue tierra de vascos y de sus tambos hace ya mucho tiempo, pero siempre será tu hogar. El tiempo pasó, ya no estás solo, no huís de nada, ya no eres desconocido... Ahora descansas en la historia del Ciclón. Entendí por ahí que a los vascos nos quedan historias pendientes... pero de eso me encargo yo", remata Muniain con imágenes en las que se le ve en primer plano enfundándose la camiseta azulgrana y que se convierte en el heredero de Isidro Lángara y de Ángel Zubieta, ex del Athletic que también tuvo que emigrar cuando Bilbao cayó en manos del ejército nacional de Franco y que jugó 13 años (1939-1952) en San Lorenzo de Almagro.
"Es un honor tenerte en casa, Iker. Boedo te va a enamorar", se podía leer en otro texto compartido por la entidad azulgrana junto a la imagen de la firma del contrato entre Muniain y el presidente de San Lorenzo, Marcelo Moretti, con la camiseta sobre la mesa. Posteriormente, en un vídeo se veía al mediapunta navarro paseando por el césped del Estadio Pedro Bidegain -conocido como el 'Nuevo Gasómetro'- y explicando sus primeras sensaciones tras firmar como agente libre un contrato hasta diciembre de 2025 con sendas cláusulas de 'escape' para las dos próximas ventanas de transferencias de invierno y verano.
"Siento una felicidad enorme de poder estar aquí. Todo lo que vi me encantó, me ilusionó. Cuando uno es jugador y ve a la hinchada de un equipo tan grande como la de San Lorenzo y esa creatividad que ellos tienen y cómo alientan al equipo me remueve por dentro y me dan muchas ganas de vestirme de corto y empezar a jugar", aseveró un futbolista que llega tras ganar dos veces la Supercopa de España (2015 y 2021) y en una la Copa del Rey (2024) con el Athletic Club, que espera ayudar a sacar al Ciclón del bache de juego y resultados.
El equipo del porteño barrio de Boedo se encuentra en el retrasado puesto 23 de los 28 equipos que compiten en la Liga Profesional del Fútbol de Argentina, muy lejos de las plazas que dan acceso a competición continental. También se despidieron por la vía rápida de la Copa Libertadores, eliminados en octavos de final por el Atlético Mineiro brasileño, y de la Copa Argentina, tras caer a manos de Vélez Sársfield también en octavos. "Cuidaremos a su capitán, Athletic", prometieron desde San Lorenzo, un club de marcado sentimiento vasco.