Las habituales pruebas en pretemporada (no se quedaron hombres como
Núñez o
Titi), la ausencia hasta la recta final de piezas claves como
Rodri, Ismael, Robert o Raúl García, y, sobre todo, el cambio de entrenador experimentado este verano convertían al
Betis Deportivo en un equipo en transición. Por eso, había expectación por ver la puesta de largo, con más luces que sombras a la postre, que se saldó con un agónica 3-2 sobre el
San Roque de Lepe que deja las primeras claves para el análisis de un equipo llamado a aspirar a todo de nuevo en el
Grupo X de
Tercera división. El primer proyecto de Calzado al frente de la cantera con mando en plaza llega con exigencia.
En defensaLa apuesta por
Xiker (y la aún no confirmada por el nigeriano Zakari) advierten que la salida de balón ya no será como en la 'era José Juan'. Obviamente, un equipo de formación no se decantará a menudo por el voleón, si bien es cierto que se ha buscando una mayor contundencia en los centrales, especialmente en el juego aéreo, para evitar los problemas del año pasado, fantasmas que reaparecieron en la segunda mitad, hasta el punto de que el
San Roque llegó a igualar un 2-0 prometedor.
Ismael es el '5'Pese a tratarse de un mediocentro de corte más creativo,
Ismael es el nuevo '5' del segundo equipo, el pivote del futuro, una evolución que ya esbozó en verano a las órdenes de Rubi.
Ruano ha dado galones al palaciego como medio de cierre, acompañado de un igual como
Rodri. El primo de Fabián se incrusta entre los centrales cuando hace falta que la generación sea más limpia, pero la orden es que el equipo debe ser más directo, más vertical. A menudo, construirá sus ataques por dentro para terminarlos por fuera.
Y es que
Ismael y el de Talayuela buscan mucho a
Robert, que ha olvidado ya sus inicios como extremo para ser el ‘10’, dejando los costados del 1-4-2-3-1 para
Baena (a la espera de Jime) y
Juan Moreno, el segundo a pierna cambiado. Ellos percuten asiduamente con diagonales, pues los laterales se proyectan muchísimo. En la derecha no hay nadie específico, reubicando ahí el nuevo míster a un estilete como
Iván Navarro y a un esteta como
Altamirano, que puede utilizar (como hizo con el segundo) en sus demarcaciones naturales si se presenta la ocasión. La profundidad es otra máxima.
A explotar prosEl
Betis Deportivo, en los últimos años, se caracterizaba por hacerse dueño de la posesión, con la que defendía y atacaba. Tener el balón te garantizaba menos problemas y te confería más opciones de marcar, especialmente si eras paciente y esperabas el momento oportuno. El filial 19/20 tiene más prisa, lo quiere hacer todo antes, en parte porque ha ganado experiencia y saber hacer con
Juan Moreno, Xiker y Mizzian (22 años los dos primeros, 19 el último, lo que casa poco con su personalidad en el campo).
Como, quizás, este equipo arriesga más por imprimir una marcha más a su fútbol, se antoja fundamental que mantenga una presión ordenada y escalonada en todo el campo.
Ruano quiere explotar una de las virtudes de la tremenda juventud que tiene su plantilla, el fondo físico, con lo que prima la anticipación, el achique de todos tras una pérdida y la presteza a la hora de realizar transiciones.
Caché y méritosEl ahora tocado
Carlos Marín, Edgar, Robert, Rodri, Iván Navarro, Julio Alonso... Los 'pesos pesados' conservan su sitio y lo pondrán difícil a los nuevos. Pero los pujantes
Ismael y
Raúl derriban todas las barreras.