Rivera opta por la autocrítica para evitar más amonestaciones

Más de veinte amarillas y tres rojas; ese es el balance, en cuanto a amonestaciones, del Écija en los últimos cinco partidos. Los seis puntos logrados en esos cinco enfrentamientos siempre han estado rodeados de expulsiones y decisiones arbitrales con un claro perjudicado, el conjunto de Miguel Rivera.

El técnico malagueño es consciente de esta situación, aunque no se la llega a explicar del todo. "No somos un equipo peleón, nuestro estilo se basa en jugar la pelota. Simplemente no hemos tenido mucha suerte" con las actuaciones de los colegiados, declaró el preparador de la escuadra astigitana. Rivera también consideró que existe una "excesiva rigurosidad hacia nuestro comportamiento" sobre el terreno de juego cada jornada.

Ya que el factor externo no puede ser controlado, desde el cuerpo técnico que comanda ´Miqui´ se ha optado por "tratar de minimizar los riesgos" de ser amonestados. Es decir, controlar todas las "acciones innecesarias". "Queremos evitar hablar de los árbitros, ahora nos dedicamos a hacer autocrítica. En fútbol es normal que de vez en cuando se produzcan entradas, pero vamos a controlar todo lo que esté en nuestras manos para evitar problemas", sentenció Rivera, quien concluyó expresando que "tantas expulsiones nos están pasando factura; son muchas jornadas con la misma situación".

Esta terapia, a prueba el fin de semana ante el filial del Betis.