El Gobierno español, con el visto bueno de la FIFA, ha tomado la decisión de intervenir la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), algo que hará oficial este jueves tras la reunión de la comisión directiva del Consejo Superior de Deportes (CSD), en la cual someterá a votación si Pedro Rocha y la comisión gestora de la RFEF son suspendidos provisionalmente por falta muy grave tras haberse extralimitado en sus funciones.
De este modo, Rocha no podrá ser presidente del entre federativo, pese a que su candidatura fue la única proclamada como válida por la comisión electoral, al cambiar su condición de testigo a investigado en el procedimiento que investiga el juzgado de Instrucción número 4 de Madrid por posibles contratos irregulares de la RFEF durante los últimos cinco años, periodo que incluye la etapa en la que fue vicepresidente económico.
Se abre, por tanto, un vacío de poder hasta, seguramente, después de los Juegos Olímpicos, cuando se celebrarían las elecciones ordinarias. Pero para la organización y el correcto funcionamiento de las obligaciones que tiene esta institución de forma cotidiana, se contará con una comisión que estará formada por varias personas de un prestigio considerable.
En este sentido, el diario As asegura que el elegido por el Gobierno no es otro que Vicente del Bosque. Se pretende que el ex seleccionador nacional sea quien lidere el cambio junto a una ex jugadora internacional, apuntándose a Virginia Torrecilla como una de las candidatas, y un abogado que propondrá el CSD o el COE.
De momento, sin embargo, el técnico campeón del mundo no ha dado todavía el ‘sí’ a la propuesta. Antes, desea aclarar una situación con muchas incógnitas para saber realmente cómo se encuentra la situación.
Para empezar, Del Bosque quiere conocer de primera mano la postura de la FIFA en todo esté escándalo. Pero también desea saber qué pasará si el CSD decide no suspender finalmente a Pedro Rocha y la Junta Gestora, lo que podría propiciar que todos ellos mantengan su cargo mientras la Federación es intervenida gubernamentalmente.
Pese a ese extraño posible escenario, el Gobierno está empeñado en atajar la crisis con esa comisión que lideraría Del Bosque. Sería algo inédito, pero en la RFEF aguardan a la decisión del CSD.
Lo ideal para el Gobierno es que Rocha dimitiera, pero eso no va a suceder. Al contrario, si no es suspendido, en el seno de la RFEF entienden que se trataría de una victoria y que podría abrirse un periodo de transición en el que trabajarían codo con codo con dos personas de la “casa” como el ex seleccionador y Virginia Torrecilla. Rocha no renunciaría mientras tanto a sus poderes y sería el mismo quien convocaría unas nuevas elecciones, aunque se da por hecho que no se presentaría a la reelección.