El
Betis quiere regresar a la senda del triunfo (no vence desde el duelo frente al
Gipuzkoa) frente a un rival directo, un
Bilbao con el que ha vivido descensos y ascensos en los últimos años. Ambos llegan con las mismas necesidades a la cita (16:00 h en San Pablo). Una victoria es la que distancia al Betis de los bilbaínos, por lo que sumar un triunfo se antoja clave.
Curro Segura, entrenador verdiblanco, podrá contar con todos los jugadores disponibles, en busca de que jugadores como
Ouattara o
Harrow alcancen el tono competitivo adecuado.
El Bilbao afronta una cita con bajas en sus filas y sin haber podido entrenar toda la semana a causa de los positivos por covid en el entorno del primer equipo. Uno de esos positivos, el único de un jugador, es el del base sueco Ludde
Hakanson, que no viajó a Sevilla por tener que quedarse confinado. Tampoco se desplazó a la capital hispalense el pívot estadounidense Aaron Jones, de quien el Cholet francés ya anunció este viernes su fichaje.
El acierto de un
Jaylon Brown irregular pero valiente, como siempre desde que llegó en Bilbao, y la ayuda del pívot Goran
Huskic, recién cedido del
San Pablo Burgos tras superar la covid, pueden ser claves para que el Bilbao Basket cambie en Sevilla el semblante.
Un rictus contrariado por la acumulación de derrotas -diez en once partidos oficiales-, las bajas, el ataque del coronavirus y la falta de entrenamiento consecuencia de ello con la que se vio obligado que viajar.
En el duelo particular, las estadísticas están de parte de los visitantes, vencedores en 19 de las 30 ocasiones en las que se han enfrentado. Sin embargo los de
Mumbrú no vencen en San Pablo desde 2017 (86-94).
El encuentro será dirigido por los colegiados Andrés Fernández, Luis Miguel Castillo, Daniel Hierrezuelo.