El castellonense
Sergio García, el malagueño
Miguel Ángel Jiménez, el canario
Rafa Cabrera Bello, el vizcaíno Jon Rahm y el granadino Scott Fernández forman el elenco español que participa esta semana en la 145 edición del
Open Británico en Royal Troon, en la costa occidental de Escocia.
"Como en todos los grandes hay que ser consistente, pegar buenos golpes y cometer pocos errores", dijo
Sergio García acerca de su vigésima participación en este tercer grande del año, después de acariciar el liderato en el Abierto de Estados Unidos, donde acabó en el quinto puesto.
El veterano
Jiménez acumula 23 participaciones en el Abierto Británico y, a sus 52 años, llega a Troon entre los primeros del Circuito Senior Estadounidense. "Estoy intentando ajustar algunas cosillas con el swing, pero me encuentro bien y dándole decente", dijo a Efe el malagueño, que solo ha logrado clasificarse para uno de los cuatro grandes esta temporada.
"Estoy jugando muy bien y estoy teniendo un gran año. Me queda conseguir una victoria y clasificarme para la Ryder", dijo a
Cabrera Bello, 28 del rÁnking mundial después de una impresionante escalada y actuación en 2016. "La noto muy a mi alcance, aunque no está garantizada ni mucho menos", dijo
Cabrera acerca de su participación en el equipo europeo de la Ryder Cup, que se disputará en septiembre en Minnesota, Estados Unidos.
El golfista de Barrika Jon Rahm también ha aterrizado a la carrera en el golf profesional, con un brillante tercer puesto en el Quicken Loans del circuito profesional estadounidense, que le garantizó la participación en su segundo grande del año y de su joven trayectoria.
"Me he pasado siete días sin tocar un palo y me ha venido muy bien", dijo a Rahm, que hace tres semanas culminó sus dos títulos consecutivos del mejor aficionado del mundo con un 23 puesto en el complicado recorrido de Oakmont, sede del Abierto de Estados Unidos.
"Es un honor poder jugar en un major en mi primer año de profesional. Voy a hacer mi juego y a ver dónde me lleva", dijo el otro debutante en el Abierto Británico, Scott Fernández, que superó con éxito uno de los torneos clasificatorios para llegar a Troon.
Fernández y Rahm han prestado atención a los consejos de Jiménez durante las rondas de prácticas previas a la primera jornada del jueves. "Hay que jugar cada hoyo con estrategia desde el tee y driblar los búnkers, y luego paciencia", aconsejaba el malagueño.
El recorrido de Royal Troon, que albergó el Open Británico por última vez en 2004, cuando el estadounidense Todd Hamilton ganó con diez golpes bajo el par, se presta a buenos resultados para los que sepan navegar los vientos escoceses.
"Con el viento predominante, en los nueve primeros se puede hacer resultado, pero en la segunda vuelta hay muchos hoyos largos, estrechos y contra el viento", dijo
García, número 12 del mundo e integrante del equipo olímpico español en Río.
Los Juegos Olímpicos de 2016, a los que regresa el golf después de casi un siglo, han sido el telón de fondo de las jornadas preliminares del Open Británico, donde el estadounidense Jordan Spieth acaba de anunciar su baja y se suma a las renuncias a la competición olímpica de una veintena de golfistas en los primeros puestos del ránking mundial.
"Cada uno elige lo que cree que es mejor para él y yo he hecho lo que más ilusión me hacía, a pesar de que hay riesgos", dijo García, que representará a España en Río junto a Rafa Cabrera Bello.