Malas noticias para Rubi y para el filial. El delantero del Betis Deportivo
Raúl García ingresó por la noche del domingo en el Hospital Santa Angela de la Cruz de Sevilla con un dolor abdominal agudo y las pruebas que se le realizaron confirmaron el diagnóstico de
apendicitis.
Por esta razón,
el ariete ha sido intervenido en dicho centro hospitalario, con una consecuente ausencia cuya duración no está determinada. No en vano,
su vuelta a los entrenamientos queda a expensas de cómo se desarrolle su evolución post-quirúrgica, por lo que ahora mismo no existe ninguna certeza.
El precedente más reciente no resulta para nada halagüeño, pues
Diego Lainez pasó por quirófano por el mismo motivo y su recuperación ha resultado lenta. Tanto que se operó el 15 de febrero y su primer entrenamiento, aún parcial, fue el 3 de marzo, por lo que su disponibilidad se alargó prácticamente un mes.
Es una ausencia muy importante para el filial, en el que se erige como ‘pichichi’, ante la hipotética disputa del ‘play off’ express para ascender a Segunda B,
como para el propio Rubi, ya que el técnico catalán necesita todos los recursos posibles para las últimas jornadas, por la exigencia física y las posibilidades de que haya lesiones o afectados por coronavirus.
El canterano
iba a entrar posiblemente en los planes de Rubi y contaba con opciones de disputar minutos, merced a los cincos cambios establecidos en este nuevo marco y la acumulación de partidos en poco tiempo.
Cabe destacar que
Raúl ha debutado en el primer equipo esta temporada a las órdenes del preparador de Vilasar de Mar, entrando en cuatro convocatorias y participando en tres partidos, ante
Levante (dos minutos),
Villarreal (11) y
Mallorca (3).