Análisis del Valladolid

El blindaje como punto de partida

El blindaje como punto de partida
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Con condiciones No terminan de confiar en él en Villarreal, pese a sus buenos números. Frío en el área rival.
Óscar MurilloÓscar Murillo 2 min lectura
La de Sergio González fue la última bala de la directiva del Valladolid el curso pasado para que el ascenso no se escapara. Su debut no fue el esperado (derrota por la mínima ante el Sporting), si bien el catalán ya sólo perdió una vez en los siguientes once encuentros, con ocho triunfos y dos empates que devolvieron al Pucela a la elite cuatro años después. Con Miguel Ángel Gómez de nuevo al mando de la dirección deportiva, al proyecto 2018/2019 le ha costado arrancar, aunque desde el banquillo han dado con la tecla adecuada, gracias a un movimiento táctico que tiene mucho que ver con la confección de la sala de máquinas.

Así, Sergio ha pasado de su 1-4-2-3-1 predilecto al 1-4-4-2 asimétrico, con Míchel Herrero y Rubén Alcaraz en el doble pivote, así como Toni Villa y Keko u Óscar Plano -ambos son bajas- más abiertos. La presencia de dos puntas (generalmente, el también lesionado Duje Cop y Enes Ünal) ha contribuido al final de la sequía, que duró hasta la explosión de la jornada 5 (3-3 en Balaídos), transformándose los albivioletas en un bloque mucho más equilibrado.

Tanto es así que llegan a La Palmera tras tres victorias consecutivas, con tan sólo un tanto en contra, fruto de una mayor concentración defensiva, de la solidaridad de la línea de medios y de la solvencia en las transiciones ofensivas, más importantes, incluso, que la profundidad de sus laterales.
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Análisis del Valladolid - Con condiciones No terminan de confiar en él en Villarreal, pese a sus buenos números. Frío en el área rival. - foto1
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Análisis del Valladolid - Si se serena... Mejor de enganche que escorado, tiene un cambio de ritmo que hace daño a los rivales. Intermitente. - foto2
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Análisis del Valladolid - Emergente Extremo que sorprende desde atrás y que desequilibra con velocidad y regate. Puede ser segundo punta. - foto3
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Análisis del Valladolid - Apagafuegos Más lateral que el fino extremo de sus inicios, hoy volverá a sus orígenes. Buen pase y eficiencia. - foto4
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Análisis del Valladolid - Pivote con pluses Mediocentro de briega y despliegue físico que, además, goza de una excelente técnica a balón parado. - foto5
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Análisis del Valladolid - Metrónomo Conserva capacidad de distribución y criterio en el pase, amén de visión de juego y botar la estrategia. - foto6
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Análisis del Valladolid - Por sus fueros Lo pasó mal con Jémez en el Rayo, pero jugar más arropado le beneficia. Explosivo y profundo. - foto7
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Análisis del Valladolid - Completo Dominador por alto y expeditivo al corte, tiene salida de balón y tira del pase en largo muy a menudo. - foto8
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Análisis del Valladolid - Sin complejos Lateral que no se proyecta demasiado, aunque es un aceptable marcador. Tácticamente aplicado. - foto9
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Análisis del Valladolid - Un cerrojo El salto a Primera no sólo no le pesa, sino que le ha hecho más imprescindible. Meta fiable y resolutivo. - foto10
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Análisis del Valladolid - A sus 23 años, Fernando Calero se ha erigido de manera insospechada en el líder de la zaga pucelana, hasta el punto de que, tras su excelente final de campaña en la 17/18, hubo varios equipos de Primera que se pensaron seriamente pagar su cláusula de rescisión, cifrada en 11 millones de euros. De momento, el central de Boecillo no ha renovado por el Valladolid, que se beneficia de su extraordinario crecimiento personal y deportivo. Pese a no ser muy alto, su fuerte es el juego aéreo, tirando también de anticipación y de una gran lectura de los partidos. Se encuentra en su mejor momento. - foto11

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