El sufrimiento de Alcaraz le mete en octavos de Wimbledon

Carlos Alcaraz demostró una vez más su destreza en el tenis al enfrentarse a Nicolás Jarry en un emocionante partido de Wimbledon. El joven español tuvo que anticipar la dirección de los potentes disparos de Jarry y mantener la paciencia y la calma para vencer al chileno por 6-3, 6-7 (6), 6-3 y 7-5, asegurando así su lugar en los octavos de final del torneo por segundo año consecutivo.

No fue un partido espectacular, pero las condiciones climáticas en Londres no lo permitieron. La lluvia constante obligó a cerrar la pista central, lo cual benefició las opciones de Jarry, cuyo potente saque es aún más efectivo en ausencia de viento que dificulte el golpeo de la pelota.

Consciente de su capacidad para arrebatar un set al número uno del mundo, Jarry planteó un juego de pocos golpes, basado en intercambios rápidos y en los cuales Alcaraz no podía imponer su ritmo. La clave para el joven español era anticipar el lado hacia el cual Jarry dispararía su potente cañonazo y rezar para que el impacto terminara en el campo del chileno.

Así, Alcaraz se fue adaptando poco a poco a los rápidos intercambios de golpes. Después de siete juegos, tuvo la oportunidad de romper el saque de Jarry y la aprovechó. Ganó el primer set y esquivó una bala, porque Jarry, a pesar de sus carencias, obligaba a mantener una concentración constante. Un par de errores podían significar la pérdida del set.

Sin embargo, Alcaraz se encontró con una desventaja de 1-4 al comienzo del segundo set, lo que le costó mucho trabajo recuperar. Perder el set en el tie break fue un golpe a la confianza del español, quien por primera vez en el torneo cedía un parcial.

Pero Alcaraz se levantó con determinación en el tercer set, rozando la perfección con solo cinco errores no forzados y sin permitir ninguna oportunidad de quiebre a su oponente. El partido volvía a su curso normal y Alcaraz enderezaba el rumbo en un encuentro que se presentaba complicado.

Sin embargo, Jarry ajustó su enfoque, atacando con saques fuertes y yendo al frente, casi de manera kamikaze. Esta estrategia resultó efectiva al aprovechar las pocas oportunidades que dejaba Alcaraz. Como en el segundo set, Jarry tomó una ventaja casi insuperable de 0-3, obligando al español a luchar contra corriente, sintiéndose incómodo y sabiendo que tenía que ganarlo todo para evitar un hipotético quinto set.Y al igual que en el segundo set, Jarry no pudo mantener la ventaja, se derrumbó y Alcaraz no dejó lugar a desempates aleatorios. Después de casi cuatro horas de partido, el joven español derrotó a Jarry con un parcial de 7-5 y avanzó a los octavos de final por segundo año consecutivo.

Ahora, Alcaraz espera al ganador del duelo entre el italiano Matteo Berrettini y el alemán Alexander Zverev, su primer gran desafío en Wimbledon en términos de ranking y títulos. Si las condiciones climáticas lo permiten, el partido se jugará el lunes.