Paula Badosa sigue luchando por regresar a su mejor nivel. La tenista española –actualmente número 79 del mundo–, quiere dejar a atrás un 2023 marcado por una grave lesión sufrida en Wimbledon y disfrutar de lo que le depare 2024; sin embargo, hasta la fecha no está pudiendo alcanzar su deseo por culpa de una serie de problemas físicos que le han hecho parar dos veces en el mes y medio que llevamos de año.
Superado el último de esos contratiempos, el cual la llevó a ausentarse del torneo de Abu Dhabi, la jugadora de 26 años recibió una invitación para participar en el Masters 1.000 de Doha (Qatar). Allí ha estado unos días en los que ha sido capaz de pasar la primera ronda, pero no de repetir tal logro en el siguiente encuentro, en el cual empezó arrasando a la canadiense Leylah Fernandez para terminar viendo cómo su rival remontaba.
Ha sido hasta cierto punto un partido raro. En el que podemos decir fue un set catastrófico de Fernandez, la española se mostró implacable para llevárselo por 0-6 a su favor en tan sólo 32 minutos. Ya en la segunda manga, y tras el 1-1 inicial, Badosa no pudo mantener el ritmo –sobre todo con su saque– y sucumbió en las dos siguientes. En el segundo hubo poca historia y se resolvió por 6-2, pero el tercero fue otra historia.
La raqueta española mejoró su juego y llevó el parcial decisivo hasta el 3-3 antes de ponerse con un 15-40 a favor para romper el servicio de Fernández y encarrilar el choque. No sólo no lo consiguió, sino que en el siguiente juego fue la de Canadá quien hizo el break para después resolver con su servicio.
En octavos de final, Leylah Fernández se medirá a la quinta favorita del torneo catarí, la china Qinwen Zheng (n.7), que se impuso a la polaca Magda Linette en tres sets, por 6-2, 2-6 y 6-3. Una hora y 59 minutos necesitó la asiática para logra una increíble remontada y cerrar el marcador con dos mangas a su favor.
Más allá del partido de Badosa, la jornada de este martes empezó con la retirada de la ucraniana Marta Kostyuk ante la rusa Anastasia Pavlyuchenkova, número 32 del mundo, cuándo iba perdiendo por 2-1 en el primer set, lo que condujo a que la medallista olímpica, natural de Moscú, pasara directamente a octavos de final, dónde se medirá a la sexta cabeza de serie, la checa Marketa Vondrousova (n.8 WTA).