Antonio José Medina4 min lecturaCarlos Alcaraz conocía este jueves en Melbourne el duro camino que le espera si quiere ganar el Open de Australia por primera vez. Al tenista español le ha tocado como posible cruce de cuartos de final el rival que nadie quería, un Novak Djokovic que es el gran dominador de este torneo y que se ha preparado a conciencia desde octubre para volver a ser protagonista en los Grand Slam después de un año sin serlo.
Para llegar allí ambos tendrán que ganar cuatro partidos y seguir vivos en la segunda semana de este primer grande de la temporada, pero pocos dudan a día de hoy que todo hace indicar que ese soñado cruce, el mismo de la final de los últimos Juegos Olímpicos, se verá en el Rod Laver Arena.
Djokovic y Alcaraz se cruzaron en un set de entrenamiento este martes en Melbourne y el serbio se impuso por 7-5. El tenista murciano también jugó -y perdió-, al día siguiente, ante De Miñaur y tiene previsto para este viernes el último duelo de preparación de este Grand Slam frente al también australiano Popyrin.
Esa ha sido toda la preparación del español, cuya pretemporada ha sido objeto de debate a todos los niveles. El hecho de que, a primeros de diciembre y tras dos semanas de parón, jugara sendos partidos de exhibición frente a Ben Shelton y Frances Tiafoe abrió un debate en el que, hoy día, se sigue opinando. El motivo no es otro que el que hizo eso fuera Carlos Alcaraz, el mismo que se había quejado de lo cargado que está el calendario.
Hubo gente como Andy Roddick que se mostró comprensivo, otros, como Mats Wilander, que lo apoyaron, pero fueron más los que lo han criticado por jugar esos dos partidos. A ellos se ha unido ahora el extenista y entrenador Boris Becker, quien ha dado un palo a Carlos Alcaraz y le ha pedido que se deje de jugar "demasiadas exhibiciones" y se centre en ganar títulos. "Carlos Alcaraz tuvo un mal calendario de torneos en 2024 porque jugó demasiado", avisa el alemán en Becker Petkovic, un podcast presentado por el propio Boris Becker y por la extenista germana Andrea Petkovic.
Becker, no obstante, tiene buenas palabras para el murciano, pero quiere verlo a pleno rendimiento todo el año y no con los altibajos de las dos últimas temporadas. "Carlos es un divo en la cancha en un sentido positivo, un verdadero artista. Pero sólo se le puede dejar salir cuando realmente cuenta. Tiene que arder cuando sale a la cancha. No quieres ver a un Alcaraz mediocre, quieres ver a alguien que está al cien por cien", avisa el que fuera número uno del mundo.
En este sentido, Boris Becker secunda al que fuera su agente y mentor, Ion Tiriac, quien hace unos meses criticó la planificación comercial que hay en torno a Carlos Alcaraz. "Quieren aprovechar ya los frutos a nivel económico, cuando acaba de comenzar su carrera. Hay que tener más paciencia y dejarlo tranquilo porque el dólar que ganen hoy no será nada comparado con el que puedan ganar dentro de unos años”, asegura el dueño del Mutua Madrid Open.