Francisco Salas3 min lecturaLa jornada en Roland Garros ha estado marcada por la lluvia, que no ha dejado ni siquiera terminar los partidos del primer turno en las pistas exteriores, pero eso no ha evitado que los dos estadios principales hayan tenido mucha acción, y es que era el turno, además de Carlos Alcaraz, de dos jugadores que han tocado metal en esta complicada campaña de arcilla. Hablamos de Stefanos Tsitsipas y Andrey Rublev. El primero consiguió imponerse en el Master 1000 de Montecarlo, y el segundo hizo lo propio en Madrid, no obstante, nada de eso vale en París, y hoy lo han tenido difícil. En segunda ronda se enfrentaban a dos especialistas en la superficie, Daniel Altmaier y Pedro Martínez, respectivamente.
Parecía un paseo para el finalista de 2021, pero se enredó Stefanos en su contra el alemán, que aún así acabó ganando por 6-3, 6-2, 6-7 y 6-4, para seguir adelante con vistas a la segunda semana. Había superado de forma más plácida la primera ronda, pero tuvo que emplearse a fondo en una reedición de la final júnior que ya ganó hace ocho años al germano en este mismo escenario. Estaba avisado el griego, puesto que Altmaier se ha ganado en París una buena reputación de matagigantes, tras haber derrotado en 2020 al italiano Matteo Berrettini, entonces octavo favorito y el año pasado a su compatriota Jannik Sinner, que era noveno favorito. Su rival por un puesto en octavos será Lorenzo Sonego o el chino Zhizhen Zhang, cuyo partido se ha suspendido en el primer set.
Por su parte, el ruso, sexto cabeza de serie, se deshizo en tres sets, 6-3, 6-4 y 6-3, de Martínez, camino de la tercera ronda de Roland Garros. Y es que el ganador del torneo de Madrid, que en dos ocasiones ha alcanzado los cuartos en París, se mostró muy sólido frente al español que nunca ha superado a un rival de ese ránking. Ni aquí ni en ningún otro grande ha podido pasar del quinto partido, pero para llegar siquiera a optar a ello, tiene que seguir ganando, y fácil no va a ser, puesto que para empezar, espera al vencedor del duelo entre Alexandre Muller y Luca Nardi, que también está a medias, puesto que la lluvia ha hecho imposible que siga adelante.
Tanto el noveno como el sexto cabeza de serie van a tener la gran ventaja de llegar más descansados al viernes, pero aún así, no va a ser nada fácil, porque como estamos viendo, todo puede pasar en los partidos al mejor de cinco sets, más aún en tenistas como ellos, muy dados a las desconexiones.