Pese a encontrar durante todo el verano tremendas dificultades para fichar,
el gran caballo de batalla de Joaquín Caparrós y sus adjuntos
estaba en las salidas. Aun llegando ofertas de distintas formas y países, los jugadores con los que apenas cuenta Pablo Machín han estado poniendo muchas trabas para dejar el Sevilla.
Uno de los que más dolores de cabeza ha creado, y no era algo nuevo, era
Paulo Henrique Ganso. El brasileño apenas ha tenido minutos durante la pretemporada (poco más de 10 ante el Zalgiris, y estuvo a buen nivel) y el técnico soriano, ya sea porque no le encaja, ya sea porque se lo han recomendado desde la planta noble, no ha contado con él.
La cuestión es que Ganso no ha quiso irse ni a China, ni a Turquía, ni a Brasil... Y, por su elevada ficha (casi dos millones netos), tampoco ha encajado en los planes de los clubes españoles a los que el Sevilla le ha ofrecido.
El último, el Girona. En Francia, empero, surgió en las últimas horas una posibilidad, con el
Amiens, y finalmente ha terminado cristalizando, tras desplazarse su agente hasta la capital hispalense para buscar una solución, tal y como desveló
ED. El club francés se ha guardado
una opción de compra que asciende a 10 millones de euros, según medios galos.
Lasso se quedaCarlos Marchena trató de convencerle sobre el césped tras el encuentro frente al Sigma Olomouc, en unas imágenes captadas por
ESTADIO, pero
Borja Lasso, al que le resta una sola temporada de contrato, se ha negado a cambiar de aires.