Bajan revueltas las aguas por Nervión, donde la derrota en el derbi ante el Betis ha puesto la puntilla a un primer tramo de la temporada en el que las sensaciones sobre el campo auguraban un futuro gris con Eduardo Berizzo en el banquillo. Pero no han cambiado demasiado las cosas en el Sánchez-Pizjuán con la llegada de Vincenzo
Montella al banco, habiendo un largo trabajo por delante en este mes de enero por parte de Óscar Arias y su dirección deportiva.
Un refuerzo por línea se antoja necesario en Nervión para intentar reconducir el rumbo del Sevilla en este tramo final de la temporada, emparejado en con el United en los octavos de Champions y con el Atlético de Madrid en los cuartos de Copa. Una exigencia que requiere mayor personalidad en la zona ancha, donde Nzonzi, pese a su vuelta a los terrenos de juego, no está aportando lo que se espera de él. La
prioridad de
Óscar Arias sigue siendo el noruego
Sander Berge, un centrocampista de 21 años que, al igual que el brasileño Arana, es una de las apuestas personales del director deportivo sevillista. Un joven futbolista por el que el pasado verano
llegó a ofrecer el Sevilla 12 millones de euros, topándose con la negativa de un Genk que es tremendamente duro a la hora de negociar y que, aunque ahora estaría más por la labor de dejarlo salir, no lo haría a cualquier precio, contando Berge con 'novias' como el Liverpool, entre otros clubes de la Premier.
Una difícil tarea en la que Arias, sin embargo, no ha dejado de trabajar desde verano para convencer al futbolista, a quien le encanta LaLiga. Sin embargo, según ha podido conocer ESTADIO Deportivo,
poco se ha avanzado al respecto de cara al presente mercado de enero, de ahí que la dirección deportiva haya abierto su abanico ante la resistencia del Genk por un futbolista que, además, se ha perdido los últimos diez partidos de su equipo por lesión, por lo que difícil sería un refuerzo que viniera a sumar desde el primer día en este mes de enero.
Arias, pese a ello, seguirá trabajando en el fichaje de un Sander
Berge que parece tener claro que su futuro está lejos del fútbol belga, por lo que si no es ahora, en enero, intentará cambiar de aires el próximo verano, cuando Arias volverá a intentarlo.
Enrique García3 min lectura