La magnitud de los objetivos del
Sevilla exige como condición para salir indemne una inmediata recuperación de los golpes, porque a estos niveles varios pasos en falso se pagan a un precio muy alto y este multimillonario proyecto no puede permitírselo. Así, tres días después de la derrota en
San Mamés, la segunda de la temporada en su segunda salida de prestigio, los de
Berizzo se enfrentan en
Moscú al imperativo de levantarse para no hipotecar la obligatoria meta de obtener el pase a octavos y pugnar por el primer puesto del
Grupo E. Líder por el momento, los nervionenses se han sumergido en el frío moscovita con la intención de dejar atrás el revés con los 'leones' y consolidar, con tres puntos, su posición de privilegio. Y es que amarrar las seis unidades en los dos próximos choques contra los rusos significaría garantizar la clasificación y acercarse a la posibilidad de cruzarse en octavos con un rival más asequible. Enfrente, un
Spartak que no pierde desde el 19 de agosto pero que en nueve partidos sólo ha conseguido tres victorias, dos en los últimos choques ligueros y ninguna de ellas en las dos citas europeas, con sendos empates a un gol con
Maribor y
Liverpool, afrontando este duelo con dos puntos y en plena racha negativa en Europa, donde no se impone desde octubre de 2012 (nueves encuentros).
Con recursos en ataque, hace aguas atrás, lo que debe maximizar un
Sevilla con un arsenal arriba y dudas en defensa.
Kjaer, que acabó el sábado con molestias, finalmente viajó y, a tenor de que realizó el entrenamiento de ayer en el escenario del encuentro, es muy posible que lo introduzca en el once. Si no fuera así, desplazaría a Mercado al centro de la zaga junto a
Lenglet con la consecuente entrada de
Corchia. Por delante, Pizarro ejercerá del tocado
N’Zonzi como pivote, mientras que
Banega vuelve para asumir el timón. A su lado podría estar Sarabia, aunque también podría decantarse por el '
Mudo' o
Ganso para conectar con una línea de tres que formarían
Navas,
Nolito y
Muriel. Un tridente de lujo para la redención en una noche fría en la que el Sevilla sólo entrará en calor con los tres puntos.