El nivel de exigencia impuesto en
Nervión por la propia entidad trae consigo un frenético ritmo de trabajo de su dirección deportiva, que está ya planificando la próxima temporada sin que la actual haya finalizado y con el equipo envuelto en más de un frente. De ahí que
Monchi y su cuerpo de trabajo esté ya pensando en reforzar la zona ancha, que el próximo verano podría quedarse desguarnecida con la más que probable marcha de
M’Bia, que acaba contrato, y con el probable interés de los grandes de Europa por futbolistas como
Krychowiak o
Iborra. Por ello, no es de extrañar que el de San Fernando haya pensado de nuevo en el chileno
Carlos Carmona, al que ya intentó firmar el pasado verano -y el anterior, cuando se marchó
Medel-, como bien informó este diario.
Un renacido interés que empezó a tomar forma durante el reciente amistoso en
Argentina con
River Plate, donde el de San Fernando coincidió con el representante del pivote chileno, que el próximo verano, a diferencia del pasado, sí abandonará la disciplina del
Atalanta, conjunto que está luchando por mantener la permanencia en la
Serie A del Calcio. Con contrato en vigor hasta 2018, después de que renovara con el conjunto italiano al ver incrementado sus emolumentos ante el interés sevillista, Carmona pretende dar un nuevo salto en su carrera, contando ahora con el beneplácito de un Atalanta que, a diferencia del verano pasado, necesita mayor liquidez.
Un primer contacto entre la partes que,
tal y como ha podido conocer ED, tendrá su continuación el próximo mes de
mayo; momento en el que
Monchi y el agente del jugador se reunirán de nuevo, una vez que éste arribe a España después de haberse reunido con los rectores del club de
Bérgamo. De cuadrar las cifras, tal y como ocurría con el jugador el verano pasado, el fichaje del chileno podría gestarse a lo largo del próximo mes de mayo.