Antonio José Medina4 min lecturaLa celebración de los vigentes campeones de la NFL, Kansas City Chiefs, que el pasado domingo se clasificaron para disputar la cuarta Super Bowl en los cinco últimos años, quedó empañada por varias noticias que, por un lado, han dado mal agüero a los supersticiosos, por otro, han sobrecogido a sus aficionados y a los del mundo del fútbol americano y, por último, suponen un contratiempo para ese decisivo partido contra los San Francisco 49ers.
En cuanto a esto último. El equipo de Kansas City ya conoce que no podrá contar para la Super Bowl LVIII con la presencia de su ala defensiva Charles Omenihu, que se retiraba lesionado en el segundo cuarto de la final de Conferencia Americana (AFC) ante los Baltimore Ravens y que, finalmente, sufre por la rotura de ligamento cruzado anterior de una rodilla, por lo que llegará justo para el inicio de la próxima temporada.
Se trata de un jugador clave en el esquema del coordinador defensivo de los Chiefs, Steve Spagnuolo, ya que es el segundo jugador que más balones captura en los pases de 'quaterback' y ahora tendrá que suplirlo ante los 49ers con Mike Danna o Brandon Thompson. Precisamente, el duelo ante el equipo de San Francisco era muy especial para él, ya que militó en los 'Niners' hasta 2022.
Los Chiefs ya asumían, cuando se retiró lesionado, que difícilmente podría estar recuperado en dos semanas y, al menos, les queda el consuelo de que, en los dos últimos cuartos ante los Ravens, la defensa se mostró igual de agresiva y contundente que sin uno de sus referentes.
Falta le hará toda la ayuda posible porque en estos partidos cuenta todo. Y el debate que se ha abierto ahora tiene lugar con la camiseta con la que disputarán la final. Los Kansas City Chiefs ejercerán de locales en la Super Bowl 2024 y, por ello, se han ganado el derecho a elegir su jersey rojo para defender el título.
Una decisión que no ha dejado muy satisfechos a los supersticiosos de su equipo, ya que el blanco suele ser el color que se alza habitualmente con la victoria en estas finales. Para ello, apelan a la estadística. De las últimas 19 finales, 16 las ganaron los equipos que fueron de blanco. El consuelo que les queda es que en la Super Bowl LIV celebrada hace cuatro años, los Chiefs vencieron de rojo a los mismos 49ers, con Mahomes como estrella.
Y, por último, la mala noticia que tiene en estado de 'shock' a todos los aficionados de Kansas ha sido la aparición de tres seguidores de los Chiefs congelados cuando habían ido a casa de un amigo a ver un partido de su equipo. Aunque no hay aún detenidos la versión del único 'superviviente' no cuadra y en las próximas semanas podría haber novedades.