Un intratable Sinner pospone el sueño de Alcaraz en Wimbledon

Muy amigos fuera de la pista, el murciano peleó sin lograr contener al italiano, que jugará sus primeros cuartos de final en Londres y fue prácticamente infalible pese a dejar escapar cinco bolas de partido al final

Un intratable Sinner pospone el sueño de Alcaraz en Wimbledon
Alcaraz no pudo con su amigo Sinner. - @Wimbledon
Juan SierraJuan Sierra2 min lectura

El tenista español Carlos Alcaraz no pudo con el italiano Jannik Sinner, intratable este domingo en los octavos de final del torneo de Wimbledon. El murciano perdió en cuatro sets (6-1, 6-4, 6-7(8), 6-3) y dijo adiós al tercer 'Grand Slam' de la temporada, no sin pelear pero lejos de su mejor versión en un test de máxima exigencia que calibraba las opciones de ganarse entrar en el selecto grupo de los candidatos a ganar algún grande.

El murciano, de 19 años, vio truncado su sueño tras toparse con un excelso y portentoso Sinner, prácticamente infalible antes de sufrir para rematar la faena, dejando escapar hasta cinco bolas de partido. En cuartos de final, el transalpino se medirá al ganador del duelo entre Tim van Rijthoven y Novak Djokovic que cierra la jornada de este domingo en la hierba londinense.

Sinner se apuntó un 6-1 en media hora con el que marcó territorio. El español empezó perdiendo su saque en el segundo set y su rostro evidenciaba lo lejana que veía una remontada. Ni con 2-0 se planteó rendirse, haciéndose con la tercera manga en el 'tie-break', después de salvar dos bolas de partido de su enrachado rival.

En el cuarto, Sinner volvió a apretar y Alcaraz volvió a intentar resistir, salvando otras tres bolas de partido, pero el italiano no perdonó más y celebró su primer pase a unos cuartos de final en el All England Tennis Club de Wimbledon.

"Carlos es un rival muy duro y siempre es un gran placer y muy divertido jugar contra él", dijo Sinner tras conseguir la victoria. El propio Alcaraz, que se marchó ovacionado por el público, había reconocido el viernes que existe una amistad que va más allá de la pista entre dos de los jóvenes jugadores llamados a dominar el circuito en la próxima década.