El
Granada y el
Celta se enfrentan este domingo en el Nuevo Los Cármenes en un partido vital para los andaluces, que buscarán un triunfo que les saque de los puestos de descenso, y menos trascendente para los gallegos, que ya están virtualmente salvados, aunque quieren sellar de forma matemática la permanencia una campaña más en LaLiga Santander.
El Granada, antepenúltimo con 31 puntos, a uno de la salvación tras el empate del Cádiz en Sevilla, sigue ansiando su primera victoria de 2022 como local, ya que no vence ante su afición desde que lo hiciera a finales del pasado diciembre ante el Atlético de Madrid, mientras que solo ha ganado un partido en las quince últimas jornadas.
Para este encuentro,
Karanka volvió a alinear el 4-2-3-1 con algunas variantes como la vuelta al once de Germán y Montoro; además de del canterano Sergio Barcia, que partía de inicio debido a las bajas por sanciones en la zaga nazarí.
El Granada entró al encuentro muy activo, ansioso ante su público, que volvió a responder con una entrada más que notable en Los Cármenes. Sin embargo, se fue diluyendo poco a poco. Ya en el minuto 8, el Celta la tuvo para adelantarse en un fallo de Barcia, que se durmió ante Santi Mina.
Maxi le detuvo su disparo, y aunque el rechace le cayó a Cervi, este no logró acertar gracias a la posición de Germán bajo palos.
El Granada también le metió el miedo en el cuerpo al Celta. No obstante, en el ataque, los rojiblancos se mostraban muy atascados. Incapaces de tomar una buena decisión, como en casi toda la temporada. A pesar de ello,
Suárez gozó de la mejor ocasión para los suyos tras un gran pase de
Uzuni que dejó solo al colombiano. Sin embargo, su disparo fue desastroso, al muñeco, y Dituro despejó sin muchos problemas.
Antes del descanso, Iago Aspas 'jubiló' a Germán en una acción individual en la que el gallego dejó al capitán rojiblanco por los suelos para plantarse solo ante Maximiano. El internacional español, cruzó demasiado la pelota y se marchó rozando el poste de la meta del cancerbero portugués.
A la vuelta del entretiempo, el Granada se mostró más incisivo arriba y los primeros intentos fueron para los de itor Karanka, aunque sin provocar acciones meritorias de Dituro, que vio amarilla por tocar la pelota con la mano fuera de su área.
Ya se veía venir el gol celeste hasta que Luis Milla perdió un balón en campo contrario y en el correcalles de Iago Aspas, este apuró hasta el final para batir a Maximiano, aunque el esférico acabó introduciéndolo en su propia portería Antonio Puertas, que no acertó a despejar.
A la desesperada volvió a mover el banco Aitor Karanka introduciendo a Gonalons de central por un Barcia desesperado con Aspas, a Molina arriba y a Arias y Arezo para dar más frescura.
Cuando ya todo parecía visto para sentencia, y con el Granada volcado arriba, la fe de Machís imperó por encima de todo para poner un centro que se fue envenenando y se coló en la meta de Dituro
para salvar un punto valiosísimo y no distanciarse de los puestos de salvación.