Once días han pasado desde que Jorge Martín se alzara con el título de campeón del mundo de MotoGP, el primero de su carrera y que le ha devuelto lo que le quitó hace doce meses, cuando no pudo imponerse a Pecco Bagnaia por una serie de errores que le terminaron por costar el entorchado en Valencia. Pero esta vez ha sido infalible y ha sorprendido al hacer de la regularidad su mayor arma, pues en ella se ha basado para, sumando hasta 8 triunfos menos que su rival, llevarse el 1. Y sí, literalmente llevarse, porque desde el año que viene será la nueva estrella de Aprilia.
A mitad de año Ducati tuvo que decidir si subía a la moto oficial en 2025 a Martín o si por el contrario era Marc Márquez el agraciado, y acabó siendo el ilerdense. Y esta afrenta no sentó bien al del Pramac, que acabó firmando por la marca de Noale. Pero aún así ha sido capaz de superar máximo referente actual de los de Borgo Panigale, lo que le ha llevado a pensar que en la plana mayor de la marca, pueden haberse dado cuenta del error. En el telediario dela televisión pública, ha confesado que cree que "ahora mismo, seguro que se están arrepintiendo".
Los últimos días del de San Sebastián de los Reyes están siendo un auténtico baño de masas, apareciendo en los programas más importantes de la televisión y la radio españolas, pero sobre todo, mostrando una felicidad inmensa, ya que ha cumplido su sueño. "Era mi sueño desde pequeño, siempre soñé con ser campeón de MotoGP. Conseguí el título de Moto3, pero me faltaba este. Ha sido mucho trabajo y sacrificio, pero poder finalmente poner mi nombre en la torre de los campeones, junto con los nombres que hay en ella, es muy grande y me hace muy feliz". Más aún tras haberse quedado tan cerca en 2023, una experiencia que le ha ayudado esta vez.
No solo se impuso a Pecco Bagnaia, si no que luchó contra los elementos para batir a todo un gigante como Ducati. Porque pese a que su material era el mismo que el de Pecco, no eran vistos igual al estar uno en el equipo oficial y otro en un satélite. "El trato de fábrica es completamente diferente, cuando tu eres oficial tienes a todo el mundo trabajando para ti intentando que seas el ganador. Yo siento que éramos doce personas en mi equipo contra doscientas o trescientas. Eso lo ha hecho más difícil". Aunque eso sí, han luchado en igualdad en lo que a la máquina se refiere. "Le agradezco a Ducati que no haya hecho nada en contra, nadie se lo esperaba, todos esperaban que pasara algo raro en las últimas carreras, pero han sido muy nobles y eso es de admirar".