Estadio Deportivo7 min lecturaAlcañiz (Teruel), 19 sep (EFE).- El español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) cuenta con una oportunidad de oro para sumar y seguir su carrera, inabordable para sus rivales, camino del quinto título mundial de MotoGP, con la disputa este fin de semana del Gran Premio de Aragón en el circuito de Motorland Alcañiz.
Márquez, líder destacado del campeonato del mundo, con 67 puntos de ventaja sobre el italiano Andrea Dovizioso (Ducati Desmosedici GP18) y 70 puntos respecto al también italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1), llega a otro de los circuitos que se podría considerar talismán para él, aunque con algunas consideraciones importantes.
La primera de ellas, y una de las más importantes, visto como se desarrollaron los acontecimientos en el circuito "Marco Simoncelli", viene dada por el hecho de que sus rivales más directos en la carrera por el título, los pilotos de Ducati, han entrenado en el trazado turolense, como también lo hicieron en Misano, y ganaron, algo que no hacían desde 2007 con el australiano Casey Stoner.
Ese ya es un dato relevante a tener en cuenta, si bien a favor del piloto de Repsol Honda se debe tener en cuenta, primero, que en Motorland Alcañiz ha ganado en tres ocasiones (2017, 2016 y 2013) de las cinco que ha estado allí -las otras dos (2013 y 2014) se cayó, aunque en 2014 logró atravesar la línea de meta en decimotercer lugar-, además de ser en cuatro ocasiones, desde 2013 a 2016, el más rápido de entrenamientos.
Eso ya le confiere cierta confianza en sus posibilidades, aunque lo cierto es que sus rivales de Ducati se "han quitado ya la piel de cordero" y son los auténticos lobos de la temporada 2018, en la que han demostrado que la evolución de las Desmosedici es, con diferencia, la mejor y más positiva entre todas las fábricas que disputan el campeonato del mundo de MotoGP 2018.
Además, Ducati cuenta en sus filas, al menos hasta el final de la temporada, con el español Jorge Lorenzo, el único de sus pilotos que sabe lo que es ganar en Motorland Alcañiz, que lo hizo en 2014 y 2015, si bien entonces como piloto de Yamaha.
Bien es cierto que el fabricante de Borgo Panigale nunca ha logrado ganar en el trazado turolense y esa estadística negativa puede cambiar este año, ya que tanto el propio Jorge Lorenzo, que se querrá resarcir de su caída en el Gran Premio de San Marino, como Andrea Dovizioso, que ganó esa carrera, van a llegar a Alcañiz con un estímulo más que especial.
Tanto Lorenzo como Dovizioso se las tendrán que ver con Marc Márquez, sin lugar a dudas el más claro favorito a la victoria en el trazado aragonés, en donde su compañero de equipo, Dani Pedrosa, podría tener la oportunidad de despedirse de la competición con una victoria que sumar a su palmarés y que ya consiguió en 2012, sin olvidarnos de los pilotos de Yamaha.
A pesar de acumular la peor racha de su historia sin victorias, desde el Gran Premio de Holanda del pasado año en Assen con Valentino Rossi (22 GG.PP.) y antes de eso con los 22 grandes premios que transcurrieron desde Australia 1996 y Gran Bretaña 1998, Valentino Rossi y Maverick Viñales son dos pilotos a tener siempre en cuenta, aunque ninguno de los dos ha logrado la victoria en Motorland Aragón, en donde Rossi ha sido tercero en cuatro ocasiones (2012, 2013, 2015 y 2016).
La tercera plaza del británico Cal Crutchlow en San Marino le confiere cierta relevancia ante la tercera cita española de la temporada, en la que también podrían destacar el francés Johann Zarco (Yamaha YZR M 1),los italianos Danilo Petrucci (Ducati Desmosedici GP18) y Andrea Iannone (Suzuki GSX RR) o el español Alex Rins (Suzuki GSX RR).
No se debe olvidar que por su condición de local bien podrían "tener algo que decir" pilotos como Álvaro Bautista (Ducati Desmosedici GP17), Aleix Espargaró (Aprilia RS-GP) o Pol Espargaró (KTM RC 16).
Bautista encadena nada menos que los últimos siete grandes premios concluyendo entre los diez mejores, con una quinta plaza como mejor resultado, en Alemania, y seguro que buscará despedirse de MotoGP, camino del Mundial de Superbike como piloto oficial de Ducati de la mejor manera posible.
En el caso de los hermanos Espargaró se antoja algo más complicado debido al bajo rendimiento de la Aprilia RS-GP de Aleix Espargaró y al proceso de recuperación de su grave lesión medular en lo que se refiere a Pol, quien se tuvo que retirar en la última parte de la carrera de Misano Adriático debido al cansancio físico y la falta de tiempo en competición.
Tito Rabat será baja nuevamente por encontrarse en pleno proceso de recuperación y su plaza tiene que ser cubierta por el equipo Reale Avintia, si bien las críticas vertidas sobre el joven piloto francés Christophe Ponsson por su nula experiencia en MotoGP, aunque en Misano Adriático cumpliese más que sobradamente al terminar la carrera y, lo que es más importante, sin generar ninguna situación de riesgo, forzaron al equipo a intentar buscar otras opciones.
Una de las posibilidades que más sonó fue la del español Jordi Torres, quien tiene contrato en vigor en el mundial de Superbike con MV Agusta y corrió el pasado fin de semana en Portimao (Portugal), pero necesitaba el permiso del fabricante italiano para subirse a la Ducati y, al conseguir el mismo, será quien pilote la segunda Ducati de la escuadra andorrana.
Por Juan Antonio Lladós