Marta Sánchez3 min lecturaFernando Alonso tiene muchas expectativas puestas en el proyecto de Aston Martin, que está haciendo un gran esfuerzo para convertirse en un equipo de referencia en la parrilla. De cara a 2025 es Adrian Newey el cambio más significativo, ya que incorporarán al equipo al ingeniero más codiciado de la categoría, que ha conquistado 25 títulos mundiales, entre pilotos y constructores.
Sin embargo, el propio británico ha confesado malas noticias para la escudería, y especialmente para Fernando Alonso, quién ha tomado el mando de líder del equipo. El asturiano es el piloto de referencia en el equipo británico, pero pierde fuerzas de cara a la próxima temporada ya que Newey apenas va a poder trabajar en el monoplaza, explicando que va con retraso en el proceso respecto a otros equipos.
"Sólo podré comenzar a trabajar en Aston Martin el 2 de marzo, cuando los rivales ya llevarán trabajando en el coche de 2026 dos meses" explica el ingeniero sobre su trabajo en Aston Martin, que todavía no ha podido comenzar. Esto se debe a su contrato con Red Bull, quiénes no le liberan hasta el mes de marzo. Por ello, esto supone un golpe para el equipo y para el piloto español, que ven como el monoplaza no tendrá esa esperada mejora en 2025, y cada vez ven menos posible un salto de nivel significativo para la nueva temporada.
"También será conocer un nuevo equipo, conocer a todos los chicos y chicas que están allí y cómo trabajamos todos juntos. ¿Cuándo tiempo llevará esto? mínimo un par de semanas para tener una idea clara" añadió Newey, que tendrá menos protagonismo de la cuenta en el monoplaza de 2025. Sin embargo, ya han avisado de que Adrian es mucho más que un gran diseñador de monoplazas, si no que su rol es fundamental cada fin de semana.
Pero Newey no es el único que busca el triunfo del equipo, si no que Lawrence Stroll lleva haciendo varios cambios desde el final de temporada. El más reciente ha sido la cesión de Mike Krack como jefe de equipo y la colocación de Andy Cowell en su lugar. Un movimiento que desvela la inconformidad del canadiense y sus ansías de convertir a Aston Martin en un equipo capaz de pelear por el mundial.
Y con este retraso del trabajo de Newey no parece que en 2025 vayan a tener opciones, pero que apunta a 2026 para ser capaces de pelear contra los equipos más punteros de la categoría.