La selección española femenina de balonmano sufrió este miércoles en Irún en su primer test previo a su participación de los Juegos Olímpicos de París ante una Angola con la que se encontrará en París en la segunda jornada de la fase de grupos y que cuestionó el triunfo local hasta el último minuto, pero que acabo cayendo del lado de las de Ambros Martín por la mínima, 22 a 21. El combinado español, con las bajas de la pivote Kaba Gassama y de la central Alicia Fernández, comenzó muy bien gracias a la excelente aportación de la guardameta Nicol Wiggins y al fácil acceso a los seis metros de una defensa angoleña a la que le costó asentarse.
El campeón africano entrenado por Carlos Viver, que fuera seleccionador español y que ha dado un toque europeo a las angoleñas, mejoró a medida que transcurría el choque y con protagonismo de Simao y de la lanzador Pascola empataron el partido durante varias fases del mismo.Martín quería hacer pruebas pero no podía dejar de lado el resultado y Marta López o Maitane Etxeberria en los minutos que estuvieron en pista allanaron sus pretensiones al ofrecer juego y goles con los que poder liderar, sin amplitud eso si, el marcador de Artaleku.
Angola siguió firme también la segunda mitad, muchas de sus jugadoras juegan en Europa y las diferencias son mínimas salvo que las Guerreras ofrezcan una mejor versión que no llegaría tras el descanso, lo que le hizo que el equilibro se mantuviera y que el gol de Fonseca pusiera en ventaja a la africanas a quince minutos para el final (18-19). Sonaron las alarmas en una selección nacional que se quedó sin ideas en ataque y la guardameta rival Marta Alberto agrandaba su figura en el tramo final, aunque no sería suficiente para amargar la tarde a las Guerreras que, con un 3-0 de parcial, lograron salvar los muebles y una sufrida victoria.
Las Guerreras necesitan un cambio de rumbo de cara a la cita olímpica, porque aunque esto no sea más que una prueba, si que la dificultad va a ir creciendo, de hecho, en la capital gala van a jugar, además de contra la africanas, contra Brasil, Hungría, Francia y Países Bajos. Es vital quedar entre los cuatro primeros para acceder a cuartos de final, y entre las rivales destaca Países Bajos, verdugo de las españolas en el Preolímpico, además de la anfitriona, un equipo durísimo.