Gerard Moreno es uno de los mejores delanteros de la historia del Villarreal. El canterano del Espanyol llegó al conjunto castellonense en juveniles y, tras una cesión al Mallorca y 'explotar' en el Espanyol, volvió a Villarreal el verano de 2018, llevando 105 goles con el primer equipo del 'submarino amarillo'. El problema para Moreno son las lesiones, las cuales le han impedido disputar la inmensa mayoría de partidos las dos últimas temporadas.
La temporada 2020/21, Gerard Moreno sólo sufrió dos lesiones musculares durante el curso, dos partidos de liga en octubre y otros tres en enero de 2021, jugando esa campaña 46 encuentros y marcando 30 goles. El calvario del ariete catalán comenzó el curso 2021/22 y se ha extendido hasta el actual.
Moreno sólo pudo disputar 1.193 minutos de liga la temporada 21/22, participando en 17 encuentros y marcando 9 goles. De los 21 partidos de liga que no disputó, solo uno estuvo en el banquillo, el último encuentro del campeonato ante el FC Barcelona, el resto no pudo ir convocado por lesiones en el muslo, pantorrilla o un desgarro muscular.
Este curso continúan los problemas para el internacional español y para el Villarreal, que le echa mucho en falta. De los 26 encuentros de liga disputados hasta ahora, Gerard sólo ha participado en 16, mientras que de los 40 partidos que lleva su equipo entre todas las competiciones participó en 24.
El Villarreal suma 94 encuentros oficiales entre la temporada anterior y lo que va del presente curso, de los cuales ha podido contar con Gerard Moreno en 51, poco más de la mitad, concretamente el 54,25% de los partidos del 'submarino amarillo'.
"Gerard tenía unas molestias en el sóleo y vamos a ver. Hasta que no pasen un par de días no sabremos", dijo Quique Setién tras el partido ante Osasuna, afirmando que "Tenemos una plantilla lo suficientemente amplia. Además, con la incorporación de los chavales que nos está ayudando. Hay que mantener la fe y mirar hacia adelante".
Lo cierto es que son ya siete las lesiones musculares que Gerard Moreno ha sufrido en los últimos 18 meses, un problema que le impide tener ritmo de competición y ser todo lo útil que podría ser para su equipo y para la Selección, donde había vuelto gracias a Luis de la Fuente. Con todos estos problemas es muy difícil que se vuelva a ver al futbolista que maravilló hace tres temporadas, aunque, como dice Setién, hay que mantener la fe.