Macarena Fernández4 min lecturaQue el Valencia no pasa por su mejor racha es algo evidente y que llevamos meses comentándolo, pero no solamente en lo futbolístico. Prueba de ello son las incesantes muestras de rechazo de la afición valencianista hacia la junta directiva y, sobre todo, hacia al dueño de la entidad, el singapurense Peter Lim. Pues bien, todo eso no se queda ahí, sino que el Mestalla ahora ha entrado en escena para acumular más problemas para el club che.
A mediados de diciembre, la presidenta del club, Layhoon Chan, informaba que el 10 de enero se retomarían las obras para terminar el 'Nou Mestalla', es decir, mañana viernes. A través de un comunicado, desde el Valencia se afirmaba haber llegado a un acuerdo con la constructora que llevaría a cabo el trabajo: "El Club ha suscrito un contrato con FCC Construcción, que se convierte en la compañía constructora encargada de llevar a cabo la terminación de las obras del nuevo estadio".
Pero la mala noticia llega de la mano de un nuevo protagonista, 'Últimes vesprades a Mestalla'. Y es que, esta asociación ha presentado una denuncia administrativa en el Ayuntamiento de Valencia, además de una queja al 'Síndic de Greuges' y al Defensor del Pueblo, en la que se expresa que estas obras contienen graves irregularidades.
Una denuncia en la que la asociación, se señala varias de las irregularidades del proyecto, comenzando por que "El proyecto se presenta como una 'edición preliminar' que 'podrá ser objeto de sucesivas ediciones de desarrollo', algo incompatible con la definición legal de Proyecto de Ejecución". Añaden, además, que "se emplea una normativa derogada en algunos de sus cálculos, como en relación con la estructura del estadio y el dimensionamiento de la instalación solar". Y también que "carece de documentos imprescindibles, como un estudio de durabilidad de la estructura existente, su adaptación a la normativa vigente o los informes de seguimiento a que se hace referencia en la propia memoria del proyecto".
Por tanto, la denuncia que se ha presentado en el ayuntamiento cita que se debe "declarar la caducidad de la licencia de obras, debido al incumplimiento de sus condicionantes, como es la presentación de un Proyecto de Ejecución válido, ajustado a la normativa y la legalidad vigente y completamente definido, en el plazo establecido por el ayuntamiento". Además de que habría que "adoptar medidas inmediatas para evitar el inicio de las obras, ya que no se han cumplido los condicionantes legales establecidos en la licencia". Y finalizan diciendo que se tendría que hacer "un pronunciamiento técnico por parte del Ayuntamiento sobre la validez del proyecto presentado, así como de la auditoría encargada de determinar el coste total del estadio, dado que queda demostrado que el presupuesto del proyecto presentado no se corresponde con la realidad de la obra".
Si finalmente se sigue adelante con las obras y no son paradas por el ayuntamiento valenciano, la asociación se reservaría el derecho de actuar de forma legal para así proteger el interés público y la viabilidad futura del Valencia.