Ha comenzado una nueva era en el Sevilla FC. En la mañana de este miércoles, se dieron cita en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán el presidente, José María del Nido, su mano derecha, José Castro y el director deportivo, Víctor Orta, para presenciar la presentación oficial de Francisco Javier García Pimienta como técnico de la entidad rojiblanca para las dos próximas temporadas. En este sentido, después de que el entrenador hablase sobre sus objetivos y sobre el discutido sistema de juego que puede plantear a la plantilla, tanto el máximo mandatario del club como el principal responsable del área deportiva de la entidad atendieron a los medios de comunicación en una rueda de prensa amplia y diversa en la que se trataron temas del pasado, presente y futuro del club, a nivel institucional, y también a nivel deportivo. Con un alto nivel de autocrítica, sendos protagonistas tildaron de suspenso el análisis de la última temporada. Si bien, a título individual, el director deportivo, Víctor Orta, fue 'positivo' con su gestión en el reciente mercado invernal en el que llegaron Agoumé, Véliz y Mejbri, además de la subida del filial del que a la postre se convirtió en la referencia ofensiva, Isaac Romero. Precisamente de Agoumé y de las posibilidades de su vuelta al club, del papel que jugó Quique Sánchez Flores en el mercado de invierno y de su estado anímico, reflexionó el madrileño.
Los resultados deportivos y la posición en la que el Sevilla concluyó la temporada no invitan a ver con demasiado optimismo la última ventana de fichajes, en la que dos de los cuatro futbolistas no gozaron de minutos cuando el equipo necesitaba piernas frescas. Si bien, el vaso puede verse medio vacío o medio lleno, y fue precisamente así como lo relató el siempre sonriente y positivo Orta: "El análisis de mi mercado de invierno es positivo. Dos tuvieron protagonismo. Hicimos el mercado de invierno con el entrenador y nos pidió dos delanteros. Finalmente solo pudimos incorporar uno. Quique tenía referencias de Alejo y lo respaldó. Lugo, la situación de jugadores, el número de fichas disponibles lo dificultaron e hicimos lo que pudimos. Las llegadas de Isaac y Agoumé fueron positivas. No todos los fichajes pueden ser importantes. Intentamos adecuar el número de licencias al mercado. Yo hago una valoración positiva".
Durante la extensa rueda de prensa, saltó a la palestra el nombre de Mariano Díaz. Un jugador que pasó al ostracismo, prácticamente desde que puso un pie en Nervión, por problemas musculares y por falta de confianza de los entrenadores durante sus primeros meses. Del delantero procedente del Real Madrid, Orta mostró su lado más humano: "Sacas un nombre de Mariano, coste bajo y riesgo alto y ha salido mal. No ha rendido. Intentó sumar, no quiero que se ofenda, nos reunió en el ultimo partido y entre lagrimas se disculpó por no conseguirlo. Se encontró sano prácticamente al acabar la temporada. No me ha pasado mucho en futbol que alguien me pida disculpas por su bajo rendimiento. Él, obviamente, se dio cuenta de que no dio el rendimiento. Cuando estás tanto tiempo sin entrenar en la élite, no es fácil apretar un botón y engancharte a la élite. Personalmente no le pongo ni una coma a su esfuerzo o a sus ganas. Humanamente tuvo esas palabras".
Otro de los nombres propios a los que se refirió Orta fue el de Agoumé. El centrocampista del Ínter de Milán fue una de las sensaciones positivas de la temporada, pero las altas pretensiones de su club de origen dificultan la permanencia del jugador. "La opción de compra es objetivamente poco realista para nuestra situación económica. El Ínter sabe nuestro interés de que continúe, pero la situación es complicada. Es difícil. El Ínter y Agoumé saben lo que quiere el Sevilla, y Agoumé le ha dicho al Inter lo que quiere".
La situación económica del Sevilla FC es comprometida y Orta es consciente de ello: "Yo tengo un principio de inteligencia emocional. Trabajo con lo que tengo. Me avisaron de que las circunstancias del proyecto, de lo que había y lo que tenía. No me puedo quejar y no me debo quejar. Es complicado, la exigencia, salvar el descenso. Sinceramente, creo que quedan dos veranos que si tenemos la capacidad de sacarlo con éxito, puede ser todo mas sencillo a la hora de sacar recursos económicos. Lo que creo es que eso puede ayudar a que se generen sinergias".
Una vez analizada la temporada anterior, el director deportivo rojiblanco expresó sus sensaciones de cara a la próxima temporada y se mostró enérgico: "Estoy con ganas y con energía. Hemos encontrado un entrenador en el momento perfecto. Siento la confianza del presidente. Me ayudan en el club, me arropan. Cada miembro me ayuda. Me da a emplearme el doble para dedicarme a un club que amo. Estoy mas ilusionado que nunca".