Nueva noticia negativa para el Sevilla FC. La dinámica por la que atraviesa el club está repleta de episodios perjudiciales. Esta vez, un nuevo capítulo contrario para los intereses del club volvió a llegar sobre el césped y en forma de lesión. Fruto de la mala fortuna, durante un lance del juego entre el conjunto rojiblanco y el Real Valladolid, fue Saúl Ñíguez el futbolista damnificado. En la peor de las noticias que podría recibir García Pimienta, al margen del marcador, lo cierto es que el centrocampista se vio obligado a abandonar el césped del Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán lesionado, tal y como captaron las cámaras de ESTADIO Deportivo.
Corría el minuto 51' de encuentro cuando Saúl se derrumbó sobre la banda más cercana a los banquillos del estadio rojiblanco. El centrocampista rojiblanco se echó la mano sobre la parte posterior del muslo de su pierna izquierda y rápidamente el colegiado Pulido Santana mandó entrar las asistencias al campo. Fue tal la gravedad del asunto que poco tardaron los servicios médicos en pedir refuerzos para que el jugador pudiera abandonar el campo en camilla, ante la imposibilidad de dejar el césped por su propio pie.
Entre lágrimas, con la mano tratando de ocultar su rostro desanimado y asustado por el dolor, el centrocampista fue transportado por la parte trasera de los banquillos hacia el pasillo central de la grada baja de Preferencia, el camino más rápido para acceder al vestuario. Fue este el lugar donde los servicios médicos realizaron las primeras pesquisas para conocer el alcance de una lesión que apunta a rotura fibrilar como poco, aunque desde el club aún no transmiten un diagnóstico certero.
En su lugar, García Pimienta mandó saltar para sustituirlo a Lucien Agoumé, quien calentaba sobre la banda de Gol Sur desde el primer momento en que el 17 sevillista se lanzó sobre el césped. Así, el francés se encontró ante la inesperada y ardua tarea de suplir a un jugador que, hasta el momento de su lesión, dio orden y sentido al Sevilla, incluso con sus llegadas al área desde segunda línea.
A falta de un diagnóstico real, las primeras impresiones sobre la lesión apuntan a que el jugador tendrá verdaderamente difícil aparecer en el Nuevo San Mamés ante el Athletic Club de Bilbao, con El Gran Derbi en el horizonte del calendario rojiblanco. Sin duda, la fortuna no está del lado rojiblanco.