El Sevilla FC está siendo protagonista en el World Football Summit Europe 2024, un prestigioso congreso sobre la industria del fútbol que se celebra por tercera vez en la capital hispalense, con el Palacio de Exposiciones y Congresos de Sevilla, Fibes, como escenario. Allí, los canteranos Juanlu y Jesús Navas han participado en el panel 'Sevilla, cuna de campeones', volviendo a insistir el palaciego en que colgará las botas a final de año. Pero otro de los momentos esperados era la intervención del presidente, José María del Nido Carrasco, señalado por la grada en el último partido de LaLiga EA Sports ante el Getafe, cuando tuvo que presenciar una multitudinaria manifestación de hinchas que pedían su dimisión.
Este mismo miércoles, además, el máximo dirigente nervionense ha vuelto a recibir otro ataque de su padre y gran opositor, José María del Nido Benavente, que insiste en romper el actual pacto que mantiene en el poder al consejo de administración y alcanzar otro con los principales accionistas para derrocar a su hijo y a José Castro, a los que considera los grandes responsables de la situación deportiva y económica del club.
Pero Del Nido Carrasco, lejos de dar un paso al lado, ha querido mostrarse fuerte en una mesa redonda titulada 'La rebeldía, ADN del Sevilla FC', donde ha puesto en valor los méritos contraídos por la entidad en el pasado y ha hecho referencia una vez más al lema del 'nunca se rinde' para dejar claro que su objetivo no es otro que volver a recuperar la grandeza deportiva de la que hace no tanto disfrutaban en Nervión. "El Sevilla siempre ha demostrado ser rebelde, desde su origen. Somos el sexto club en la clasificación histórica, mirando el número de puntos. Estamos en el top seis de equipos europeos con más títulos. En el Sevilla somos ambiciosos, nunca nos rendimos. Estamos en un proceso de regeneración y vamos a crear los pilares de otro gran club. El Sevilla nunca se rinde. Nuestra afición quiere más, otro símbolo de nuestra rebeldía", insistió, dándole una vuelta de tuerca a la conferencia para titularla como 'Rebeldía 2.0. Inconformismo ante las expectativas'.
Uno de los puntos clave de ese nuevo impulso que pretende darle al club pasa por la construcción del nuevo Sánchez Pizjuán, cuyas obras espera comenzar en el verano de 2026, tal y como confirmó a Accionistas Unidos en una reciente reunión. Al respecto, el dirigente blanquirrojo, que mostró un vídeo sobre el anteproyecto que ya "es una realidad", aseguró que el que se está proyectando será "más grande y a la vanguardia de la modernidad", destacando también que el modelo de negocio en cuanto a fichajes pasa por seguir la línea de los últimos mercados.
"Hay que volver al modelo inicial del jugador desconocido y en el último mercado hemos vendido en más de 50 millones a Ocampos, En-Nesyri, Acuña y Bono, y hemos comprado por ocho a Agoumé, Iheanacho, Ejuke, Peque, Saúl y Álvaro", explicó, recordando también el papel vital que deben jugar los futbolistas criados en la carretera de Utrera, tanto a nivel deportivo como para generar futuras plusvalías, como en su día hicieron Sergio Ramos o Reyes, entre otros muchos.
"Somos un club que cuida la cantera. Le damos la oportunidad a los canteranos para que jueguen en el primer equipo", señaló, remarcando al mismo tiempo la "ambición histórica en el mercado de fichajes" y la "reinvención de un Sevilla campeón" como señas de identidad de un club "contestario", que "luchó para que los ingresos televisivos tuvieran un reparto más justo". "De 30 millones, pasamos a ingresar 80 al venderse los derechos de manera conjunta", recordó sobre la gestión que en su día lideró su padre, añadiendo en este sentido que, de forma más reciente, el club hispalense "es el único que ha denunciado los vídeos de Real Madrid TV", además de enfrentarse al FC Barcelona por el 'caso Negreira' y dejar claro su rechazo a la Superliga Europea. "Es una liga egoísta y ególatra y no prima lo que el Sevilla valora, que es la meritocracia y el éxito deportivo".