R. Madrid
B. Dortmund
Siempre se ve forzado a reivindicarse. A Rodrygo Goes le costó un mundo hacerse con un puesto de titular en el Real Madrid, a pesar de su excelente rendimiento y sus goles decisivos saliendo desde el banquillo o jugando de inicio en partidos importantes. Es una estrella en la selección de Brasil, donde incluso suele brillar por delante del aclamado Vinícius Junior. Sin embargo, todos le señalaban como el sacrificado para hacerle hueco a Kylian Mbappé. Carlo Ancelotti le ha respetado el rol, pero comienza a dar muestras de querer ceder y sentarle en pos de meter un cuarto centrocampista para ganar equilibrio. De hecho, en la pasada jornada de la Champions League, en la derrota ante el LOSC Lille, no jugó ni un minuto. Y en las dos últimas citas de LaLiga fue suplente, ante Villarreal y Celta, con escaso lucimiento cuando salió.
Esta martes, ante el Borussia de Dortmund, Carletto le devolvió la titularidad a Rodrygo y éste se reivindicó con uno de sus mejores encuentros de la temporada, si no el mejor. Se entendió como nunca con Vinícius y Mbappé, dejando a su compatriota por la izquierda y al francés a la derecha para ponerse como enganche y hacer un rol similar a lo que hacía Benzema. Contribuyó de manera decisiva a la mejoría del juego y a la remontada, pues corrió como loco a por un balón que se perdía por línea de fondo para girarse y ceder hacia la diagonal de Lucas Vázquez, que fusiló de puntera para poner el momentáneo 3-2.
El peaje que pagó el '11' puede ser caro. En esa acción sintió un fuerte pinchazo en la parte trasera del muslo y tuvo que pedir el cambio por lesión. A sólo cuatro días de El Clásico contra el Barcelona. Lo que le faltaba a Rodrygo. Rodrygo abandonó el juego de manera inmediata. Era el minuto 85' y dejó su sitio a Tchouméni con cara de circunstancias. No había peor manera de acabar un encuentro en el que se le volvió a resistir el gol, aunque lo rozó con un remate acrobático que se estrelló contra el poste, justo después del segundo tanto del Dortmund. Para colmo, el rechace le cayó a Jude Bellingham, quien con el portero germano sobre el césped se topó con el larguero.
Rodrygo fue examinado por los médicos del Real Madrid nada más acabar el choque contra el Borussia de Dortmund, en una mera exploración preeliminar. Según el primer diagnóstico, el delantero brasileño tiene una posible lesión muscular en los isquiotibiales de su pierna derecha. No obstante, el hecho de haber parado de inmediato -a Brahim hace unos meses le pasó lo mismo, siguió y se rompió- hacen conservar el optimismo de que se pueda quedar en un problema menor.
Este miércoles el jugador tendrá reposo para dejar que la zona baje la previsible inflamación. Ya el jueves será explorado en profundidad y será sometido a una resonancia magnética para determinar el alcance exacto de la dolencia. No obstante, su concurso en El Clásico del sábado se antoja improbable y habrá que ver el diagnóstico para ver qué sucede para los numerosos encuentros que hay hasta el parón de noviembre, entre LaLiga y la Champions -y menos mal que está exento de las primeras rondas de la Copa del Rey-.