Dragi Gudelj, futbolista del Córdoba CF y hermano del sevillista Nemanja Gudelj, ha vuelto a convertirse en protagonista involuntario sobre el terreno de juego. El central, que este domingo era titular ante el Melilla, ha vuelto hacer saltar las alarmas a los 27 minutos de juego, cuando se desplomó sobre el verde del Estadio Álvarez Claro.
El Córdoba CF, a través de sus perfiles oficiales en redes sociales, ya informó de que le ha trasladaron al hospital para realizarle pruebas médicas y que se encontraba "bien", al tiempo de que irán informando en cuanto conozcan nuevos detalles del estado de su futbolista. "Dragi Gudelj se encuentra bien. Fue trasladado al hospital de Melilla para que le realicen pruebas médicas tras abandonar el Álvarez Claro. En cuanto podamos, ampliaremos la información, dice el mensaje del conjunto blanquiverde. El futbolista pudo salir del campo por su propio pie y el club ha asegurado posterioremente a EFE que regresará con el resto de la expedición cordobesista a la ciudad andaluza. Del mismo modo, insisten en que, afortudanamente, "está bien", han agradecido el apoyo y el interés mostrado en el estado de salud del jugador. No obstante, agregan que no van a entrar en detalles médicos por el momento.
#[media;[proveedor:4;id:CordobaCF_ofi/status/1731279984528969931]]El serbio ya sufrió una parada cardíaca en marzo de este mismo año en pleno partido. Fue ante el Racing de Ferrol, en el minuto diez del mismo. Los precedentes del pequeño de los Gudelj, por tanto, hicieron temer lo peor a muchos de los presentes este domingo en el encuentro entre Melilla y Córdoba, donde rápidamente se llevaron a cabo todos los protocolos pertinentes, siendo desplazado hasta el hospital de Melilla. El futbolista, al caerse, se levantó de manera casi inmediata, pero totalmente desorientado y mirando hacia el lado opuesto de donde estaba el balón. Una imagen de nerviosismo ante la que los galenos reaccionaron rápidamente.
Tras el primer incidente, y después de unos primeros días angustiosos, el futbolista neerlandés de origen serbio puso los cinco sentidos en recuperarse para volver a jugar al fútbol, hasta conseguirlo. Para ello, a Dragisa Gudelj tuvieron que implantarle una desfibrilador automático (DAI), dispositivo que desde hace varios meses vela por la salud de su corazón, registrando su actividad y actuando como protección ante una eventual repetición del episodio que el futbolista sufrió en pleno partido y que este domingo ha vuelto a repetirse, aunque con menor intensidad aparente. Una taquicardia ventricular que le provocó el paro cardíaco y el consiguiente episodio de muerte súbita.Monitorizado en todo momento por los especialistas que llevaron su caso, Dragisa Gudelj apostó por volver a jugar al fútbol de manera profesional. Durante mesesvino trabajando físicamente en la sombra para estar preparado y, tras someterse a un exhaustivo control médico previo al inicio de la pasada pretemporada, el Córdoba autorizó su renovación hasta el 30 de junio de 2025. Este nuevo incidente, sin embargo, frena en seco su situación, a la espera de cómo evoluciona en las próximas horas.