El exmalaguista Isco Alarcón se ha convertido este verano, finalmente, en el gran refuerzo que deseaba Julen Lopetegui para su Sevilla FC. En la órbita nervionense desde hace varios mercados debido a su falta de protagonismo con el Real Madrid, su llegada al Sánchez-Pizjuán tan sólo ha sido factible ahora, una vez que el malagueño cumpliera contrato como blanco y haya llegado libre, bajándose notablemente, también, su caché.
Un movimiento con el que Isco cierra el círculo y trae a la memoria de todos en Málaga el nombre de otro futbolista, Bobley Anderson. El delantero marfileño fue el elegido por el Málaga CF de un jeque Al-Thani que ya comenzaba a tener problemas económicos y en claro retroceso tras haber tocado la gloria con Manuel Pellegrini en el banquillo y con jugadores sobre el campo como Joaquín o el propio Isco, entre otros.
El centrocampista marfileño Bobley Anderson llegó a La Rosaleda con 21 años y con el cartel de ser una de las promesas africanas del momento, habien sido convocado recientemente por la absoluta de su país.
A Málaga, Bobley arribó procedente del Wydad de Casablanca marroquí a cambio de un millón de euros y ya en su presentación no pasó indiferente, asegurando que lo había querido fichar el Sevilla FC, entre otros grandes clubes del momento: "Me siento muy orgulloso de ser el primer costamarfileño en jugar con el Málaga. Había clubes importantes interesados en mi fichaje como el Sevilla pero preferí el Málaga".
Con Schuster en el banquillo del Málaga CF, Bobley Anderson acabó demostrando que poco o nada tenía que ver con Isco y que se prodigaba más en sala de prensa que sobre el verde. ¿Su rendimiento? Ocho partidos como malaguista y una única titularidad. Nunca vio portería como blanquiazul.
Lógicamente, con esa carta de presentación, el nigeriano Bobley Anderson acabó saliendo en enero en préstamo al Zulte de la liga belga. Había firmado por cinco temporadas con el Málaga CF y su cláusula de rescisión estaba fijada en 20 millones de euros, pero... En Bélgica sólo participaría en otros cuatro encuentros, por lo que volvió al Málaga para buscar una nueva oportunidad en forma de cesión. Lo haría con el Alcorcón, en Segunda, y sumaría un nuevo fracaso deportivo. 17 partidos como alfarero y sólo cinco titularidades; una participación en la que sumó un tanto, en El Molinón.
Tras ello, el Málaga CF dio por perdido el millón de euros invertido en su fichaje y asumió que la cláusula de 20 millones de euros era una broma pesada. Como era de esperar, lo acabó rescindiendo y Bobley Anderson desaparecería del mapa.
Una bajada a los infiernos que tuvo su siguiente parada en la 15/16, cuando el marfileño firmaría por el Chaterauroux de la Tercera división francesa. Tenía 25 años y la vida comenzaría a complicar aún más para él, entrando en una depresión por la que el modesto club francés le acabaría rescindiendo su contrato de alquiler.
Todo iba de mal en peor. Bobley Anderson desaparece por completo de la tierra. Sus perfiles en redes sociales dejan de actualizarse y la rumorología sobre su destino comienza a engordar... Hasta que aparece un vídeo suyo en una preocupante situación que confirma los peores presagios. Bobley Anderson había caído en la marginalidad, viviendo como un sintecho y con un aparente estado mental poco recomendable.
Hasta el jeque Al-Thani reaccionó a ello. Era el 2018 y aún estaba al frente del Málaga CF. Utilizó sus redes sociales e influencias para encontrar a Bobley y traerlo a Málaga, donde tenía intención de darle un trabajo y que comenzara a entrenar con el filial blanquiazul. Pero no lo consiguió... Desde entonces, nada se sabe de Bobley Anderson, el exmalaguista que arribó a La Rosaleda para hacer olvidar a Isco y que estuvo muy cerca de fichar por el Sevilla FC. Este verano, irónicamente, Isco Alarcón ha cerrado el círculo, siendo él quien sí ha firmado por el Sevilla FC de la mano de Julen Lopetegui.