Míchel lleva días sumido en un importante dilema. Siendo un entrenador al que le tiembla poco a la hora de tomar decisiones, ahora un gran problema le obliga a ello. ¿De qué hablamos? De la situación de Oriol Romeu y Yangel Herrera y, por ende, de su centro del campo en el Girona FC.
El futbolista cedido por el FC Barcelona, Oriol Romeu, no podrá estar el domingo contra los blaugrana por la famosa cláusula del miedo; sí, esa que impide jugar contra su club a jugadores que están a préstamo. Respecto al medio internacional por Venezuela, es una lesión en el aductor izquierdo la que le aleja del duelo catalán que tendrá lugar en Montilivi. Y decimos eso porque Yangel ya le ha dejado claro a Míchel que está dispuesto a darlo todo para llegar al mencionado choque.
Así es. Estando en pleno proceso de recuperación de la mencionada dolencia, el objetivo día a día es estar en condiciones de saltar al verde el fin de semana, algo que sería todo un alivio para el preparador madrileño, ya que es una pieza clave en su esquema y que tiene la capacidad de hacer que funcione todo lo que le rodea.
Es sin duda su versatilidad lo que ha enamorado a Míchel. El venezolano es tan capaz de sostener al equipo atrás como se sumarse al ataque, lo cual le convierte en vital en ambas fases del juego. Sí, es algo así como esa pieza del engranaje sin la que el resto de elementos pierden capacidad de dar su máximo rendimiento.
Aunque su vuelta pueda parecer algo precipitada, lo cierto es que para la escuadra gerundense supondría un importante impulso. Para Míchel tanto él como Romeu son titulares, por lo que encarar el choque ante el líder sin ambos le llevaría a cambiar por completo su centro del campo, entrando seguramente tanto John Solís como Donny van de Beek. Otra opción sería adelantar a David López al centro del campo para que Krejci ocupe su lugar en el centro de la defensa.
El compromiso de Yangel Herrera es pleno. Sabiendo que para su recuperación era vital trabajar cada minuto, no tardó ni un segundo en renunciar por un día a la vinotinto para ponerse a punto lo más rápido posible de cara a un tramo del calendario muy cargado para los gironins, ya que estos debutan en una semana en la UEFA Champions League visitando al Paris Saint-Germain en el Parque de los Príncipes.