El Girona, esta temporada, ha tenido que afrontar la salida de varios de sus hombres clave, aquellos que hicieron historia el curso pasado, consiguiendo la primera clasificación para Champions de la historia de la entidad. Con este hándicap tan notable, Míchel, que ha entrado recientemente en el Olimpo de los entrenadores del club, ha tenido que competir en tres torneos, con algunas dificultades y sobresaltos. A pesar de ello, parece que, poco a poco, las cosas van volviendo a su cauce. En la zona media del torneo de la regularidad, se encuentran a pocos puntos de las competiciones europeas, pero lo cierto es que deben seguir dando pasos hacia delante para impedir volver a caer.
En primer lugar hay que tener en cuenta que el Girona, desde el primer momento, ha dejado claro que su plan no era, ni mucho menos, igualar los datos que consiguieron e la 23/24, sin duda, una de las temporadas más importantes de su historia. Y es que, después de haber ganado 29 partidos, empatado seis y perder apenas ocho, esa misión era casi imposible. Pues bien, tal y como apunta As, desde que ha empezado la vigente campaña, los de Míchel ya han perdido la misma cantidad de encuentros que en todo el último curso.
No en vano, hay que tener en cuenta que, de los 17 partidos que se han disputado hasta el momento en las tres competiciones, el Girona ha caído en ocho ocasiones, con goleadas tan dolorosas como la que tuvo que sufrir recientemente ante el PSV en la máxima competición continental. Además, hay que resaltar que apenas han vencido en seis ocasiones y empatado en otros tres compromisos, lo que demuestra que la realidad del club está más cercana a esta situación que a la que se vivió el curso anterior.
A pesar de haber sumado ya tres derrotas en la antigua Copa de Europa, lo cual les complica, y mucho, la clasificación a la siguiente fase, lo cierto es que el Girona no se encuentra, ni de lejos, en un mal momento. Después de haber sumado dos triunfos de forma consecutiva en LaLiga EA Sports, se han comenzado a asentar en la décima posición, lo que les da cierta tranquilidad. No solo eso, ya que se encuentran a pocas unidades del Athletic, quien se sitúa en la sexta plaza, la cual da acceso a la UEFA Europa League, un objetivo que, con el paso de las semanas, puede pasar de ser un sueño a una realidad para una entidad que es ambiciosa y que quiere más.
Eso sí, en la máxima competición continental, las cosas, ni de lejos, van a ser tan fáciles para los de Míchel, que necesitan dar un golpe de efecto. De hecho, tras medirse al Sturm Graz, ante el que, en teoría, no deberían tener demasiados problemas para batir, se enfrentarán al Liverpool, el Arsenal y el Milan, tres clásicos del fútbol europeo que buscan certificar su clasificación cuanto antes y que lucharán hasta el final. Por ello, el Girona necesita dar un paso hacia delante muy importante si quiere respirar tranquilo en un torneo que se prevé cada vez más exigente y complejo.