La Roma de José Mourinho, que en el día de ayer volvía al banquillo en la Europa League tras cumplir sus cuatro partidos de sanción tras la polémica protagonizada tras la final de la Europa League frente al Sevilla en Budapest, se ha complicado la vida para ser primera del Grupo G. Un punto de las dos últimas jornadas en la competición europea le han relegado a la segunda plaza, ya asegurada por otra parte, en detrimento de un Slavia de Praga que le saca ahora dos puntos de ventaja y que depende de sí misma para acabar primero de grupo y mandar a la Roma a una eliminatoria extra y contra un equipo de Champions.
Por eso mismo ayer, tras acabar el partido contra el Servette con empate a uno, a José Mourinho se lo llevaban los demonios. Y eso que la Roma se adelantó en el partido gracias al golazo de Romelu Lukaku en el minuto 21 pero el conjunto suizo acabó empatando en le 50' con un gol de Chris Bedia, lo que deja ahora a la Roma en una situación muy delicada para acceder directamente a los octavos de final.
En la rueda de prensa, 'Mou' no dudó en atacar a sus jugadores y acusarlos de devaluar la Europa League con su forma de actuar en el terreno de juego. "Hay muchos que están en el banquillo y entran en la Serie A con una gran actitud, pero luego en la Europa League parecen vagos y no mejoran su juego", señaló el técnico de la Roma, dando ya por hecho que la primera plaza está perdida y tendrán que jugar una ronda extra.
"Ahora vamos a una eliminatoria, que será difícil porque será contra un equipo que viene de la Champions League. Quedan dos partidos europeos más y no quiero hacer un drama de ir al playoff. El drama, si existe, es la mala actitud que tuvieron estos jugadores y los que entraron", añadió el portugués.
Pero José Mourinho fue más allá, y no dudó en dar nombres ya en los micrófonos de Sky Sport Italia. "Hay jugadores que una vez más perdieron la oportunidad de demostrar su valía, como Aouar". "Siempre son los mismos los que se mantienen concentrados durante los 90 minutos y no necesito nombrarlos. Luego hay gente que tiene un enfoque un poco superficial en este tipo de partidos. Es una lástima que haya una cámara en el vestuario, porque siempre les machaco. Nos tomamos ese momento del partido demasiado a la ligera", puntualizó.
"Realmente no lo entiendo. He jugado 150 partidos en la Liga de Campeones que son mucho más importantes que este y mi motivación para estos partidos ha estado siempre por las nubes. Hay quienes nos dan todo los 90 minutos y quienes hacen la vista gorda ante esta competición", acusó Mourinho para de paso, mandarle un recado a Pep Guardiola: "¿Pagarán por ello? Guardiola puede hacerlo. Si no está contento con uno, se despide, le da una patada y elige otro. No puedo hacer eso aquí. Sólo puedo intentar presionarlos todos los días en los entrenamientos, para sacar lo mejor de ellos", explicó.