Lopetegui desvela los secretos del Sevilla

El extécnico del equipo sevillista, en una master class, explica cómo se llegó a crear un conjunto campeón con 15 jugadores nuevos y en un año tan complicado

Lopetegui desvela los secretos del Sevilla
Julen Lopetegui, en los Wolves. - Wolves
Antonio José MedinaAntonio José Medina 7 min lectura

Julen Lopetegui lleva sin entrenar desde agosto, pero sigue siendo un referente a nivel mundial. El exentrenador del Sevilla FC y de la selección española, entre otros, ofrecía hoy en Roma una master class en el inicio de la novena edición del Global Summit que organzia la Academia Aspire. Ahí, el preparador vasco habló de su labor como entrenador, del fútbol actual, de su etapa en el Wolverhampton o de cómo logró que el Sevilla alcanzara su sexta Europa League con un equipo totalmente nuevo y en un año tan complicado como el de la pandemia.

"En el Sevilla fue la época más larga que he vivido en un mismo club. Llego yo y ese verano llega un nuevo director deportivo -había regresado Monchi-. Y llegan nada menos que 15 nuevos jugadores. No fue fácil ese inicio con tanta gente nueva. Teníamos que ponernos de acuerdo rápido. La pretemporada fue clave porque en Sevilla la exigencia es muy alta. Luego llegó la pandemia y reaccionamos para que fuera una oportunidad en vez de un problema. Mantuvimos contacto diario con todos los jugadores, hacíamos charlas personales donde repasábamos con ellos y analizábamos sus actuaciones en los partidos. Su nivel de actitud y predisposición fue extraordinario. Así sacamos mucha ventaja de una situación conflictiva, y después de la pandemia el equipo reaccionó muy bien, por eso ganamos la Europa League. Porque al final en el fútbol profesional tienes que ganar. Aquí, para tener razón, hay que ganar", advierte el técnico vasco, que también 'ganó' con el Wolverhampton en la que ha sido su última experiencia en un banquillo.

A la Premier llegó después de ser destituido en el Sevilla y se atrevió con un equipo que había comenzado fatal y que marchaba último. Y lo salvó. Para ello, tuvo que apelar a otra estrategia muy diferente a la que usó en Nervión. "Cada contexto es diferente. No hay una única estrategia. Cuando llegamos a los Wolves en diciembre del año pasado el equipo estaba último y yo no estaba acostumbrado a luchar por no descender. Aquello representaba un reto para mí y mi cuerpo técnico. Empezamos a trabajar en generar cuanto antes un ambiente especial. Encajábamos muchos goles, así que decidí invitar de mi bolsillo a los jugadores a comer después de cada partido en que dejásemos la portería a cero. Empieza a funcionar, ganamos y de repente se genera una energía positiva tan grande que decidimos ampliar la invitación a toda la plantilla de trabajadores del club. Se fue involucrando todo el mundo en el Wolverhampton. Al final conseguimos ocho puertas a cero, aunque me salió caro...", asume entre bromas.

Lopetegui, entrenador antes que seleccionador

La salvación le aseguró la continuidad, aunque acabó dejando al equipo después de que le vendiesen a algunos de sus mejores jugadores y apenas fichasen este verano. Eso le ha dado tiempo para seguir formándose, aunque echa de menos la adrenalina de la competición.

"Siempre digo que yo he sido entrenador de la selección española, no seleccionador español. Mi primer objetivo fue generar ese espíritu de equipo en la selección, que no es fácil por falta de tiempo y entrenamientos. Generamos mucho vínculo con los jugadores haciendo muchas reuniones individuales con ellos antes de las concentraciones, en las que ganábamos tiempo explicándole a cada uno lo que queríamos de él. Y eso crea ilusión y un sentimiento de pertenencia imprescindible", refleja de su etapa en La Roja, de la que se fue invicto.

Los futbolistas son la clave del éxito

En este sentido, asume que su forma de trabajar con cada futbolista resulta clave para sacarle el máximo rendimiento al equipo. "No puedo exigir a un jugador si no soy capaz de convencerle. Si está convencido su respuesta será mucho mejor que si se lo impongo. Se habla del ego del futbolista de manera negativa. El ego hay que controlarlo y te ayuda a ser mejor. El problema es cuando te controla él a ti. Con el tiempo te das cuenta de que, cuando eres jugador, no sabes mucho de fútbol. Juegas al fútbol, pero lo entiendes poco. Por eso dedico mucho tiempo a explicarle al jugador por qué y para qué hacemos lo que hacemos, que entiendan lo que está pasando en el campo, que seamos un equipo con respuestas", añade.

Un trabajo que realiza junto a un gran grupo de trabajo, del que él es el líder. "El fútbol ha evolucionado mucho, pero el trabajo de un entrenador se trata sobre todo de gestionar personas, recursos y de ser capaz de generar un sentimiento de pertenencia de grupo. Esto es clave. Que todo el mundo empuje hacia el mismo lado, sin fisuras, y siguiendo un camino claro. Esa es mi responsabilidad como entrenador", asume Lopetegui, quien, pese a ello, deja espacio a la libertad y a la imaginación de los jugadores: "Tú no puedes ponerle puertas al talento. El fútbol es de los futbolistas siempre. El entrenador es el responsable de cómo ellos ponen su talento al servicio de una idea colectiva para ganar. Estamos para ayudarles a mejorar. Yo no tengo que decirle a un delantero lo que tiene que hacer en el área, lo que sí puedo es ponerle muchas veces en esa situación de ventaja; y ahí ya que resuelva él con su talento", afirma el preparador vasco.